Francia e Irán abren "una nueva relación" tras las sanciones impulsando los acuerdos económicos
- El presidente iraní, Hasán Rohaní, cierra su gira europea con una visita a París
- Hollande asegura que se abre "un nuevo capítulo en nuestras relaciones"
- Teherán comprará 118 aviones a Airbus y Total comercializará petróleo iraní
- Protestas en París contra las ejecuciones y por los derechos humanos en Irán
Francia e Irán han certificado este jueves la apertura de "una nueva relación" tras la firma del acuerdo nuclear y el levantamiento de las sanciones que pesaban con el país asiático, con la primera visita de un presidente iraní a París en 17 años, que se ha traducido principalmente en varios acuerdos económicos de miles de millones de euros, así como en un intercambio diplomático centrado en la situación de Siria.
“Hoy se abre un nuevo capítulo de nuestras relaciones“
"Hoy se abre un nuevo capítulo de nuestras relaciones", ha subrayado el presidente francés, François Hollande, al término de la reunión que ha mantenido con su homólogo iraní, Hasán Rohaní, que ha cerrado en el Elíseo la minigira europea que le ha llevado antes a Italia y El Vaticano.
"Olvidemos los rencores", había comentado Rohaní antes de su reunión con Hollande, en una apelación a comenzar "una nueva relación" que aproveche "la atmósfera positiva" que ha suscitado el final de las sanciones económicas.
La captación de inversiones, de hecho, ha sido el motivo fundamental de la gira del mandatario iraní, que ofrece a los empresarios occidentales un mercado con 79 millones de consumidores. "Nos toca trabajarnos el país y no perder el tiempo", ha comentado el presidente de la patronal francesa, Pierre Gattaz, en un encuentro celebrado por la mañana en el que han participado Rohaní y el primer ministro francés, Manuel Valls.
Acuerdos multimillonarios
Por el momento, la visita de Rohaní a París se ha traducido en la firma de varios contratos con empresas como la petrolera Total, que comprará "entre 150.000 y 200.000 barriles diarios" de crudo iraní. Irán dispone de las cuartas reservas mundiales de petróleo y produce 2,8 millones de barriles diarios, aunque solo ahora va poder exportar en torno a un millón.
La multinacional del automóvil PSA Peugeot Citröen, por su parte, volverá a operar en Irán invirtiendo 400 millones de euros para fabricar coches junto a la firma iraní Khodro; la previsión es que en cinco años se produzcan 200.000 unidades.
Asimismo, el Gobierno iraní ha firmado un protocolo de acuerdo con el fabricante aeronáutico Airbus para la compra de 118 aviones por un valor superior a los 25.000 millones de dólares (casi 23.000 millones de euros) a precio de catálogo, según un comunicado difundido por la Presidencia francesa. De convertirse en un pedido en firme, supondría el encargo de 45 aparatos de la familia A320, otros 45 aviones A330, así como 16 vehículos A350 y otros 12 del avión gigante A380, según precisan los medios locales, lo que servirá para renovar la maltrecha flota de Iran Air, muy castigada por las sanciones.
Las constructoras Bouygues y Vinci, junto a la gestora de aeropuertos Paris ADP, han firmado a su vez acuerdos para desarrollar tres aeropuertos en Irán, mientras que las empresas públicas de ferrocarriles de ambos países han cerrado protocolos de cooperación en la gestión de estaciones y en alta velocidad.
Los presidentes abordan la situación de Siria y los derechos humanos
En el ámbito diplomático, la situación de Siria ha centrado la conversación de Hollande y Rohaní, aunque el presidente francés ha querido poner el acento en la defensa de los derechos humanos durante la rueda de prensa posterior al encuentro, en un eco de las protestas que ha recorrido París este jueves.
"Hemos hablado de todo, porque esa es siempre la norma de conducta de Francia", ha subrayado Hollande, destacando "el compromiso de Francia con los derechos humanos, con las libertades, algo que vale para todos los países, en todas las regiones del mundo".
Hollande también ha reclamado ante Rohaní un cumplimiento escrupuloso de los acuerdos nucleares, a lo que el mandatario iraní ha respondido que los países occidentales "deben hacer lo mismo".
En cuanto a Siria, Rohaní ha querido evitar cualquier crítica al presidente Bachar al Asad, aliado de Teherán pero señalado por París, al indicar que el problema "no son los individuos, sino el terrorismo y el Estado Islámico". En este sentido, Hollande ha abogado por impulsar las negociaciones para una transición política y, desde un punto de vista más global, ha apelado a un mayor intercambio de información para evitar atentados.
Protestas contra Rohaní en París
Al margen de lo institucional, la visita de Rohaní ha suscitado las protestas de varias asociaciones de derechos humanos y de la disidencia iraní, que ha organizado una marcha que ha avanzado pisoteando fotos del líder de la revolución islámica, Ruholá Jomeini.
Antes de recorrer las calles, varios centenares de personas se han concentrado para denunciar las ejecuciones del régimen iraní y, desde un escenario de la plaza Denfert-Rochereau, en el sur de la capital, varias personalidades francesas han criticado la posición "inaceptable" de los países europeos ante la llegada del mandatario.
Una treintena de figuras conocidas, entre ellas el que fue ministro de Justicia con François Miterrand, Robert Badinter, habían firmado previamente un manifiesto por una mayor "firmeza" de Francia frente a "las 2.000 ejecuciones de presos en Irán" desde la llegada de Rohaní al poder en 2013.
Frente al escenario, una decena de activistas del Consejo Nacional de Resistencia Iraní (CNRI), organización que reúne a diversos grupos opositores, escenificaban ahorcamientos simbólicos. El mismo motivo ha elegido la organización feminista Femen, que ha representado el ahorcamiento simbólico de una de sus activistas en toples y con la bandera iraní pintada en el pecho en el puente de Debilly, sobre el Sena, con la Torre Eiffel de fondo.