El gasóleo y la gasolina rompen su racha bajista y repuntan por primera vez en dos meses
- El gasóleo se encarece un 1% semanal hasta 0,918 euros
- La gasolina se sitúa de media en 1,104 euros por litro, un 0,8% más
Los precios de los carburantes han roto esta semana con su tendencia bajista y han registrado la primera subida desde finales de noviembre, tras encarecerse un 1% el gasóleo y un 0,8% la gasolina, según datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea (UE).
En concreto, el litro de gasóleo se ha situado en los 0,918 euros, rompiendo así con la espiral bajista de los últimos dos meses y que le había llevado a abaratar su precio en casi un 10% en lo que va de 2016.
En el caso de la gasolina, su precio se sitúa en una media de 1,104 euros el litro y vuelve así a alejarse del hito de bajar de la barrera del euro con el que había coqueteado las últimas semanas.
Este incremento en ambos carburantes coincide con la subida en los precios del petróleo, que ha llevado al barril de Brent a remontar por encima de los 35 dólares, después de haber caída hace unas semanas por debajo de los28 dólares.
Más de 18 céntimos de diferencia entre gasóleo y gasolina
Además, la diferencia de precio entre gasóleo y gasolina se mantiene en sus máximos en la última decada, superando los 18,5 céntimos.
De esta manera, el llenado de un depósito medio de gasolina de 55 litros cuesta en la actualidad unos 60,72 euros, 10,2 euros más que en el caso de un vehículo de gasóleo.
A pesar de este repunte semanal, el litro de gasóleo se puede encontrar actualmente en gasolineras de nuestra geografía a precios por debajo de los 0,8 euros, mientras que también es posible llenar el depósito de gasolina a menos de un euro por litro.
Los carburantes cuestan en España menos que la media de la UE y la zona euro, donde el precio de venta al público del litro de gasolina se sitúa en 1,249 euros y en 1,269 euros, respectivamente. Por su parte, el litro de gasóleo cuesta 1,041 euros de media en la UE y 1,012 euros en la eurozona.
El menor nivel de precios finales con respecto a los países del entorno se debe a que España pese a las subidas del IVA, a los mayores impuestos ya los nuevos gravámenes al biodiésel, sigue contando con una menor presión fiscal.