Una joven francesa reveló el paradero del cerebro de los atentados de París
- Era amiga de la prima de Abbaoud y acudió a un encuentro entre ambos
- Ha cambiado de identidad, pero una emisora de radio ha logrado su testimonio
- "Estaba orgulloso de si mismo. Estaba contento", cuenta sobre el terrorista
- La Fiscalía investiga la difusión de ese testimonio por si constituyera delito
Una joven francesa, que ahora ha cambiado de identidad por motivos de seguridad, fue quien reveló a las fuerzas de seguridad el paradero de Abdelhamid Abbaoud, el cerebro de los atentados de París, según ha desvelado ella misma en un testimonio difundido por la emisora de radio RMC.
La testigo, identificada con el nombre de Sonia y a quien se escucha con la voz modificada, era amiga de Hasna Airboulahcen, la prima de Abbaoud, a la que este acudió para esconderse tras los atentados y para que le ayudara a preparar un nuevo ataque en el complejo financiero de La Défense, a las afueras de la capital.
Abaaoud tenía previsto cometer esa acción seis días después de los atentados que costaron la vida a 130 personas en París, el 19 de noviembre, y, según el testimonio de la joven, tenía pensado atentar contra un centro comercial, una comisaría y una guardería.
Sin embargo, el 18 de noviembre tanto él como su prima murieron, junto a otro terrorista, en el asalto de la policía contra un apartamento de la localidad de Saint Denis en el que se ocultaban, localizado gracias a las indicaciones proporcionadas por Sonia.
Encuentro con el terrorista
La testigo ha contado a la emisora que estaba con Aitboulahcen cuando esta recibió una llamada procedente de Bélgica: su primo Abaaoud necesitaba ayuda para esconderse durante unos días en París y le pedía que fuera a buscarle a un apartamento de Aubervilliers, a las afueras de París.
“No son inocentes, hay que ver lo que pasa en nuestro país, en Siria“
Sonia acompaña a su amiga y, aunque en un principio no reconoce a su primo, finalmente le identifica. "¿Participaste en los atentados del 13 de noviembre?", le pregunta. "En las terrazas del distrito X, pero no pude terminar [mi misión]", responde Abaaoud. "Pero, mataste a gente inocente", le reprocha. "No son inocentes, hay que ver lo que pasa en nuestro país, en Siria", contesta el terrorista.
Según el testimonio, el terrorista se mostró sonriente y aparentemente sereno. "Estaba orgulloso de si mismo, contaba las cosas como quien había ido de compras y había encontrado un detergente en oferta. Estaba contento", ha relatado Sonia.
Abaaoud también reveló a la testigo algunos de los detalles de su entrada en Europa procedente de Siria, asegurando que lo hicieron escondido entre los refugiados. También comentó que había unas 90 personas de diferentes nacionalidades -sirios, iraquíes, franceses, alemanes, ingleses- que estaban "repartidos" por toda la región de París.
Corregir "fallos"
Sonia intenta convencer a Hasna para que denuncie a Abaaoud y al resto de hombres que le acompañan, pero su amiga se niega porque sostiene que su primo solo va a estar un par de días en París, para terminar su "trabajo" y después irse.
“Hemos dejado muchas pistas y no hemos acabado el trabajo. Estoy aquí para asegurarme de que no haya más fallos“
Esta afirmación pone a Sonia en alerta, que pregunta directamente a Abaaoud por qué no va a un hotel y deja en paz a Hasna. "No puedo, hemos dejado muchas pistas y no hemos acabado el trabajo", explica. En concreto, se refiere a los "fallos" en el Estadio de Saint Denis (donde se hicieron estallar tres terroristas) y subrayada: "Estoy aquí para asegurarme de que no haya más fallos".
En los días siguientes, Sonia intenta persuadir a su amiga para alertar a la Policía, pero se vuelve a negar, hasta que, en un momento dado, rompe a llorar y confiesa que su primo "va a morir" en un nuevo atentado que planea llevar a cabo ese mismo jueves en el barrio de La Défense.
Abbaoud le había pedido a su prima que le consiguiera dos pares de zapatos y dos trajes, con los que pretendía pasar desapercibido en el distrito financiero. El terrorista aseguró que iban a atentar contra un centro comercial, una comisaría y una guardería, según el testimonio de la mujer.
Una llamada clave
Entonces, la testigo llamó al teléfono facilitado por la policía tras los atentados de París, lo que, según RMC, permitió a los investigadores dar con el paradero de Abaaoud.
“Ahora vivo mal, pero lo prefiero antes de vivir con la muerte de personas inocentes en mi conciencia“
Obligada a cambiar de domicilio y de identidad por motivos de seguridad, la testigo asegura sentirse abandonada por el Estado y señala que tiene problemas para rehacer su nueva vida. "Ahora vivo mal, de forma muy precaria, pero sinceramente lo prefiero antes de vivir con la muerte de personas inocentes en mi conciencia", asegura.
Tras la difusión del testimonio de Sonia, la Fiscalía de París ha anunciado en un comunicado la apertura de una investigación por los cargos de "violación del secreto de instrucción" y "puesta en peligro de vidas ajenas", entre otros.
La investigación tratará de determinar "las condiciones en que han podido ser recogidas las informaciones difundidas" por la emisora de radio francesa.