La llama del amor brilla menos a partir de los 10 años de relación
- La intensidad más alta se da en relaciones de menos de una década
- A partir de los diez años, decae y se estabiliza
- Así lo demuestra un estudio de la Universidad Complutense de Madrid
¿La intensidad del amor romántico decae con el tiempo? Para comprobarlo, investigadores de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) y de la Universidad Estatal de Nueva York en Stony Brook (EEUU) han entrevistado a 2.988 parejas heterosexuales de la Comunidad de Madrid con edades comprendidas entre los 18 y los 80 años. Es la primera vez que un estudio español analiza la naturaleza del amor romántico en parejas con relaciones duraderas.
Según los resultados obtenidos, la intensidad del amor en parejas que llevan entre 20 y 30 años no tiene diferencias significativas, aunque las relaciones inferiores a 10 años muestran niveles más altos de esa intensidad. El 17 por ciento de los hombres y el 18 por ciento de las mujeres encuestados han afirmado sentirse 'muy intensamente enamorados', una proporción que varía en función de la duración de la relación.
Así, las relaciones de menos de una década muestran niveles más altos de intensidad que las que superan esta cifra, aunque llega un punto en que se estanca y no disminuye. "No encontramos diferencias significativas en la intensidad del amor en las parejas que llevaban entre veinte y treinta años, o más de treinta", han destacado los autores.
“Solo el 1% de hombres y mujeres informaron “no estar enamorados”, lo que implica que más del 90% asegura sentir amor romántico hacia su pareja. La cuestión es la intensidad”, explica María Luisa Cuenca Montesino, investigadora de la facultad de Psicología de la UCM y coautora del estudio, publicado en Spanish Journal of Psychology.
“No encontramos diferencias significativas en la intensidad del amor en las parejas que llevaban entre veinte y treinta años, o más de treinta. “
En general, los porcentajes más elevados fueron los de las personas que decían sentirse “muy enamoradas”, un 32,1%, y “enamoradas”, un 27,6%. En parejas de más de diez años, las cifras se situaban en el 17,1% las “muy enamoradas", y en el 18,9% las “enamoradas”.
Por su parte, en parejas de cincuenta años de edad, el 4,3% afirmó sentirse “muy intensamente enamorada” aunque no habían mantenido relaciones sexuales en el último mes.
La clave está en la felicidad
A través de cuestionarios, los investigadores también analizaron las variables que más influían en este amor. La felicidad en la relación de pareja fue la más importante. “La intensidad del amor puede ser un reflejo de la satisfacción en la relación”, señala Cuenca Montesino.
Pensar de forma positiva en la pareja y las relaciones sexuales también influían en gran medida en la relación. Los autores encontraron diferencias en cuanto al sexo, que era más importante para las mujeres que para los hombres. A ellas también les influía saber dónde estaba su pareja, algo que a ellos les preocupaba en menor medida.
“Según el estudio, el sexo es más importante para las mujeres que para los hombres. “
“Estos resultados pueden ser un reflejo de la elevada aceptación del estilo ‘Eros’ o amor romántico o pasional en nuestro país, y ponen de relieve el rol de ciertos factores culturales como las creencias sobre el amor”, explica la investigadora. En otros estudios se ha observado que en las mujeres juega un rol importante la pasión romántica y erótica, la comunicación abierta o los celos emocionales, detallan los autores.
Diferencias con un estudio similar en EE.UU.
En Estados Unidos se realizó un estudio similar y las cifras fueron superiores en lo que amor muy intenso se refiere, algo que los investigadores achacan, entre otros factores, a los diferentes estilos de entrevistas: telefónicas, en el caso norteamericano y cuestionarios anónimos, en el estudio español.
“La intensidad del amor romántico es un aspecto subjetivo que puede tener un significado diferente en las parejas de recién casados y en las que llevan más años de relación, por lo que habría que examinar ese aspecto con entrevistas personales”, apunta Cuenca Montesino.