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Mario Draghi defiende que los bancos de la eurozona son ahora más sólidos que hace cuatro años

  • El sector bancario tiene unas mayores reservas de capital y de mejor calidad
  • El BCE "está preparado para hacer su parte" para fortalecer la eurozona
  • Reconsiderará la posición de la política monetaria a principios de marzo

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Mario Draghi durante su comparecencia en la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo
Mario Draghi durante su comparecencia en la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo.

El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, ha defendido, en su comparecencia ante la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo, que los bancos de la eurozona son ahora más sólidos que hace cuatro años, cuando se vieron envueltos en la crisis financiera mundial y la del euro, aunque ha admitido que algunos se enfrentan aún a "ciertos retos".

Draghi ha señalado que el sector bancario tiene unas mayores reservas de capital y de mejor calidad. Así, el capital de máxima calidad ha pasado del 9% al 13%, con lo que las entidades son "más resistentes a los impactos adversos", y ha añadido que, si todo se mantiene igual, "los requisitos de capital no se incrementarán".

No obstante, ha indicado que el sector tiene que lidiar con la "incertidumbre" que generan desde los costes de litigación y de reestructuración que tienen que asumir algunos bancos a los activos heredados, punto en el que ha mencionado a los créditos morosos.

Además, Draghi ha dicho que el BCE está "preparado para hacer su parte" en el fortalecimiento de la eurozona, para lo cual el Consejo de Gobernadores de la institución "revisará y posiblemente reconsiderará la posición de la política monetaria a principios de marzo", teniendo en cuenta los efectos de la baja inflación y el impacto de las turbulencias bancarias en los efectos de la política monetaria.

"Si cualquiera de estos dos factores conlleva riesgos a la baja para la estabilidad de los precios, no dudaremos en actuar", ha dicho Draghi. El BCE tiene a su disposición "una variedad de instrumentos", ha dicho, "simplemente los miramos y vemos cuál es el más eficaz".

También ha enviado un mensaje a los Gobiernos de la zona euro al señalar la importancia de cumplir con las reglas de disciplina fiscal que marcan los límites de deuda y déficit públicos, del 60% y del 3% del producto interior bruto respectivamente, que un país puede acumular. "El cumplimiento de las reglas del Pacto de Estabilidad y Crecimiento sigue siendo esencial para mantener la confianza en el marco fiscal", ha dicho. "Hay mucho que se puede hacer para mejorar" y ha pedido a los países que tengan políticas fiscales -ya sean expansivas o de consolidación de sus cuentas- con una "composición que fomente el crecimiento".

"Esto significa poner el énfasis en la inversión pública, en la inversión en infraestructura y en bajar la imposición, así como finalizar las reformas estructurales que estimulan la demanda interna, aquellas que favorecen la inversión privada y el consumo privado", ha explicado.

El BCE considera eliminar los billetes de 500 euros

En otro orden de cosas, Draghi ha comunicado que la institución está "considerando" retirar de la circulación los billetes de 500 euros, por la "creciente preocupación" en la opinión pública de que están siendo utilizados para actividades delictivas, como la corrupción o la financiación del terrorismo.

Los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea encargaron el pasado viernes a la Comisión Europea y al BCE que examinen esta posibilidad y presenten propuestas de aquí a mayo, después de que Bruselas apuntara en su plan contra la financiación del terrorismo los billetes de 500 como un método para realizar grandes transferencias sin dejar rastro.

En cualquier caso, el presidente del BCE ha asegurado que es una posibilidad que debe ser analizada con "cautela" y de la "mejor manera", al tiempo que ha querido dejar claro que es una reflexión que "no tiene nada que ver" con la idea de fijar un límite máximo a las cantidades que se pueden pagar en efectivo.

"No quiere decir que la gente no podrá seguir guardando sus ahorros en otras denominaciones de billete, la gente podrá seguir guardando billetes de 200", ha dicho.