Volkswagen ofrece a sus inversores compensarles las pérdidas si renuncian a las demandas
- Se realizará a través de una fundación de la compañía
- Los que se adhieran renuncian a demandarle por la manipulación de emisiones
El fabricante automovilístico alemán Volkswagen ha ofrecido una fórmula para reparar daños a sus inversores por las pérdidas que les ha ocasionado la manipulación de emisiones de gases. El instrumento se formalizará a través de una fundación conforme a la ley holandesa y el pago de compensación estará condicionado a que renuncien a demandas contra la compañía.
"La revelación de que Volkswagen instaló dispositivos para sortear las regulaciones de emisiones para sus motores diésel ha causado a los accionistas de la compañía y tenedores de deuda pérdidas de miles de millones de euros", ha admitido este lunes la fundación vinculada al grupo germano, Volkswagen Investor Settlement Foundation.
Ahora, esta fundación ofrece a los inversores de Volkswagen en todo el mundo un vehículo sin pleito y sin coste para que recuperen los daños causados a los títulos de Volkswagen conforme a la Ley de Liquidación Colectiva Holandesa.
Esta ley permite a las partes resolver disputas internacionales al permitir a una fundación holandesa -que represente a los inversores en todo el mundo y a la empresa- solicitar de forma conjunta al Tribunal de Apelaciones de Ámsterdam que apruebe una liquidación de pago a los inversores con la condición de que renuncien a las demandas contra la compañía.
Los inversores que no estén satisfechos con el pago pueden excluirse y no adherirse a la fundación.
Según Volkswagen, al unirse como un participante en la Volkswagen Investor Settlement Foundation, los inversores protegen sus intereses y demuestran su apoyo para las negociaciones de pago entre la fundación y Volkswagen sin costes, obligaciones ni riesgos.
Una caída de las acciones de casi un 38%
Las acciones de Volkswagen costaban el 18 de septiembre del año pasado 162,40 euros al cierre de la negociación de ese día, horas antes de que saliera a la luz la manipulación de las emisiones de gases. A media jornada de este lunes, esos títulos cotizaban en la Bolsa de Fráncfort a 101,30 euros, un 6,4% más que al cierre del viernes pasado.
Por lo tanto, cuestan casi un 38% menos de lo que costaban antes de que Volkswagen reconociera públicamente que 11 millones de vehículos diésel en todo el mundo contienen el programa informático que permitía manipular las emisiones de óxidos de nitrógeno de los motores tipo EA 189.
Las principales agencias de calificación de riesgo, Fitch, Standard & Poor's (S&P) y Moody's, han bajado la calificación de la deuda a largo plazo del fabricante automovilístico alemán hasta BBB+, un aprobado alto, desde A, que equivale a un notable.