Giorgio Armani, el genio incombustible

• El terciopelo negro es el tejido estrella de su elegante propuesta
• El italiano es uno de los diseñadores favoritos de las estrellas del cine
• Vuelve a ver la alfombra roja de los Oscar

Giorgio Armani saluda junto a sus modelos tras el desfile.

Fue el triunfador de la alfombra roja de los Oscar porque vistió a tres de las mujeres más elegantes de la noche. Giorgio Armani sorprendió con el vestido de Cate Blanchett, enamoró con el traje de Charlotte Rampling y maravilló con el diseño de Naomi Watts. Y además se llevó el gran premio ya suyo era el esmoquin de Leonardo DiCaprio.

Tiene 81 años y sigue al pie del cañón, al pie de la pasarela. Su nombre está estrechamente unido a la elegancia clásica, al elegante estilo europeo y todas las actrices y actores de Hollywood han llevado alguna de sus creaciones en momentos importantes de su vida.

El terciopelo es la estrella del desfile. AFP noticias

Ahora ha clausurado la semana de la moda de Milán y lo ha hecho con un fantástico desfile. El italiano propone, para el otoño e invierno de 2016/17, prendas con personalidad, casi siempre tintadas de negro.

El tejido estrella es el terciopelo, que promete ser la sensación de la temporada, y lo vemos en distintas prendas, desde abrigos y chaquetas hasta faldas y pantalones. "He tenido que comprar una pequeña fábrica de terciopelo", decía bromeando tras el desfile, ya que lo utiliza para todo, a veces en detalles como el ribete de bolsillos o cuellos de las chaquetas.

Vestidos de noche de Giorgio Armani. AFP noticias

No faltan, para restar intensidad, los blancos y grises, especialmente en los trajes que llevan pantalones rectos y estrechos. En negro también tiñe sus delicados vestidos de noche, algunos con un estilo atrevido, sofisticado y muy femenino. Cierto aire bohemio se desprende de su coleción, que lleva vestidos largos de encaje y cristal.

Y todo muy recatado, muy invernal. Alejado de la tendencia, instalada al otro lado del Atlántico, de desvestir a las mujeres. Armani completa su armario con abrigos grandes de lana. Los vemos en tonos grises pero también con estampados de flores aportan feminidad al conjunto.

La frontera entre el armario femenino y el masculino se rompe con gracia y algunos elementos se intercambian para crear looks que juegan a ser y parecer. Armani no rescata ideas pasadas, su moda es una incansable evolución de un estilo, siempre con un patrón recio, perfecto, y a menudo con un aroma oriental.

Aires bohemios recorren la propuestas de Giorgio Armani. AFP noticias

Mucho se habla ahora de las pasarelas mixtas y es cierto destacar que Armani lleva años presentando prendas de hombre y mujer en sus pasarelas. Para ellos vemos capas de lana que son una elegante opción para abrigarse. Para ellas, además, ricos vestidos de fiesta.

Con este desfile termina el escaparate de la moda italiana que no atraviesa su mejor momento. En estos seis días hemos visto un abanico de propuestas diverso, y disperso, en el que destacan las colecciones de Moschino y Dsquared2.

Dos propuestas de Giorgio Armani vistas en Milán. AFP noticias

Ahora es París, la capital que recoge el testigo de la moda. Por delante tenemos nueve días de desfiles con propuestas distintas a las de Milán. París sigue siendo la capital de la moda y su pasarela, a pesar del empuje de Nueva York y Los Ángeles, es la más influyente y la más importante.

En París se hace moda y la moda es cultura. En Nueva York se utiliza la moda para hacer espectáculo.