La economía de Brasil se contrajo un 3,8% en 2015, su peor resultado en 25 años
- Detrás está el hundimiento de industria, construcción y comercio
- La ralentización del consumo no se compensó por la subida de exportaciones
- Atraviesa una enorme crisis política y social marcada por el escándalo Petrobras
- Los organismos internacionales prevén una caída del PIB de más del 3,5% este año
La economía brasileña se contrajo un 3,8% en 2015, lo que supone su peor resultado en los últimos 25 años, según ha informado este jueves el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE). El país sudamericano se vió castigado por la fuerte caída de la industria, la construcción y el comercio, así como por la enorme crisis política y social generada por el escándalo Petrobras.
Esta fuerte caída de la mayor economía de América Latina -la más dura desde el 4,3% de desplome de 1990, pese a que la serie histórica actual comienza en 1996- ya había sido adelantada por el FMI el pasado enero, cuando empeoró sus previsiones en 2,5 puntos porcentuales y avisó de que la actividad económica brasileña seguirá hundiéndose este año, para el que estima un retroceso del 3,5% del PIB. La OCDE se muestra aún más pesimista y estima un hundimiento del 4% en sus previsiones del mes pasado.
Estos números rojos de la economía carioca llegan después de su estancamiento en 2014, cuando el producto interior bruto creció tan sólo un 0,1%.
Además de la recesión, Brasil acabó 2015 con un déficit en las cuentas públicas de 111.249 millones de reales (unos 26.400 millones de euros), su peor resultado desde que empezó la actual serie estadística en 2001.
Para tratar de reducir ese déficit público y alcanzar un superávit primario equivalente al 0,5% del PIB, el Ejecutivo brasileño lanzó el año pasado un plan de ajuste fiscal que incluye alzas impositivas y la reducción de los gastos del Gobierno que, según el IBGE, se contrajeron un 1% en 2015.
A las dificultades económicas, se suma la crisis política que azota Brasil, cuya presidenta, Dilma Rousseff, está amenazada con la apertura de un juicio en el Congreso como consecuencia del escándalo de la petrolera estatal que puede costarle el cargo.
Fuerte retroceso de industria, construcción y comercio
Según Estadística, el conjunto de bienes y servicios producidos en el país en valores corrientes sumó 5,9 billones de reales (unos 1,4 billones de euros) y el PIB per cápita fue equivalente a 28.876 reales (6.864 euros), un 4,6% menos que en 2014.
En concreto, Estadística explica que el sector agrícola fue el único que creció el año pasado (un 1,8% anual, gracias a los cultivos de soja -que aumentaron su valor un 11,9%- y maíz, que incrementó su valor un 7,3%).
Mientras, los servicios cayeron un 2,7% y la industria se hundió un 6,2%, pese a que la extracción minera consiguió escapar de los resultados negativos con un incremento del 4,9%, gracias a la producción de petróleo, gas natural y hierro, mineral del que Brasil es el mayor exportador del mundo.
Entre las actividades económicas más afectadas, se situaron la construcción -que se contrajo un 7,6%- y el comercio, que bajó un 8,9%.
Caída del consumo por el aumento del paro
El consumo de las familias, durante años uno de los motores económicos del país, cedió un 4%, influido por el aumento del paro, la elevada inflación -que cerró 2015 en el 10,67% y superó el techo de la meta oficial- y la restricción al crédito.
La inversión creció un 18,2% -por debajo el 20,2% registrado el año anterior- y el ahorro de la población se situó en el 14,4%, inferior al 16,2% del año precedente.
A esta situación se suma la pérdida de confianza y los elevados tipos de interés, que están, con un 14,25% anual, en su mayor nivel en nueve años y que ha sido ratificado este jueves por el Banco Central de Brasil.
También afectó la caída del 14,3 % en las importaciones, mientras que las exportaciones subieron un 6,1%.
Una caída interanual del PIB del 5,9% en el último trimestre
En el cuarto trimestre del año, el PIB de Brasil registró un retroceso del 1,4% respecto a los tres meses anteriores, con lo que acumuló cuatro trimestres consecutivos en negativo.
En comparación interanual, la economía brasileña se redujo un 5,9% respecto al último trimestre de 2014, un dato récord que profundizó la caída interanual del 4,5% que registró en el tercer trimestre.
La semana pasada, la agencia de calificación crediticia Moody's rebajó en dos escalones la nota de solvencia a largo plazo de la deuda de Brasil, hasta situarla en 'Ba2' con perspectiva negativa, lo que deja abierta la posibilidad de un recorte adicional a medio plazo. De este modo, la deuda soberana brasileña recibe una calificación equivalente a bono basura por parte de las tres principales agencias de calificación ('BB/negativa' por parte de Standard & Poor's, 'Ba2/negativa' en el caso de Moody's y 'BB+/negativa' en el de Fitch).