La NASA comienza a desarrollar un avión supersónico de pasajeros
- Ha adjudicado a Lockheed Martin el diseño de un nuevo modelo
- Sería más económico y silencioso que el Concorde
- Podría empezar a surcar los cielos en 2020
La vuelta de los aviones supersónicos de pasajeros podría estar cerca, después de que el Concorde efectuase su último vuelo en 2003. La agencia espacial estadounidense (NASA) ha adjudicado al grupo aeroespacial Lockheed Martin un proyecto para comenzar a trabajar en el diseño de un nuevo modelo, que superaría los dos principales defectos de su predecesor franco-británico: el estruendo que producía y su elevado coste de mantenimiento.
Este contrato es "el primer paso hacia un posible retorno de aviones supersónicos de pasajeros, pero más silenciosos y económicos", asegura la agencia estadounidense. "La NASA está trabajando con intensidad para desarrollar aviones más respetuosos con el medio ambiente, más seguros y más silenciosos, que además sean capaces de volar más rápido", fueron las palabras del jefe de la NASA, Charles Bolden, al presentar el proyecto en Washington.
Según la NASA, el avión experimental podría entrar en funcionamiento en 2020. La agencia espacial estadounidense concibe una aeronave cuyo impacto sonoro será similar a un "latido de corazón", un golpe sordo en lugar de la explosión que caracteriza a los vuelos supersónicos y que fueron uno de los mayores problemas a los que se enfrentó el fallido Concorde, el avión de estas características más famoso que ha surcado los cielos.
La empresa privada apuesta por modelos supersónicos
El elevado coste de mantenimiento del Concorde fue su otro talón de Aquiles, hasta el punto de que dependía de la financiación de los Estados británico y francés para su viabilidad. Ahora es la empresa privada la que parece que está apostando por la carrera supersónica. Es el caso de Aerion, que planea construir un avión supersónico en colaboración con Airbus, para lo cual ya tiene su primer cliente, la empresa Flexjet jet privado. Se trata de un avión de pequeñas dimensiones capaz de llevar a una velocidad de Mach 1,5 (1.930 kilómetros por hora) hasta a doce pasajeros.
El consorcio europeo Airbus también ha ideado un modelo que podría llegar a 5.500 kilómetros por hora, un hipotético proyecto para el que hasta ahora solo ha presentado las patentes.