Apple pagará una multa de más de 400 millones de euros por inflar los precios de los libros electrónicos
- Conspiró con 5 editoriales para subir los precios y violó las leyes antimonopolio
- El Tribunal Supremo de EE.UU. no considera una apelación de la compañía
- Ya llegó a un acuerdo extrajudicial para poner fin a la demanda civil presentada
Apple tendrá que pagar una multa de unos 450 millones de dólares (unos 409 millones de euros al cambio actual) por haber inflado los precios de los libros electrónicos (e-books) en connivencia con cinco editoriales, después de que el Tribunal Supremo de EE.UU. se negara a considerar una apelación de la compañía.
El año pasado, una corte de apelaciones de Nueva York encontró culpable a Apple de conspirar con dichas editoriales para subir el precio de los e-books en violación de las leyes antimonopolio.
El gigante de Cupertino ya llegó a un acuerdo extrajudicial para poner fin a la demanda civil presentada por consumidores y varios estados, pero ahora tendrá que pagar además una multa de unos 450 millones de dólares, según la decisión de dicha corte de Nueva York, confirmada por el Supremo al rechazar la apelación de Apple, que ya no tiene más posibilidades de recurso.
"La responsabilidad de Apple de conspirar a sabiendas con los editores de libros para elevar los precios de los libros electrónicos se resuelve así de una vez por todas", ha dicho en un comunicado el fiscal general adjunto Bill Baer, miembro de la División Antimonopolio del Departamento de Justicia.
El fallo supone una nueva victoria para Amazon, que arrasaba en el mercado con sus libros electrónicos a 9,99 dólares (9,07 euros) y que vio cómo el precio de algunos e-books llegó a subir a 14,99 dólares (13,61 euros) con la entrada de Apple en el sector.
Las editoriales se confabularon para subir el precio de los e-books
La demanda, presentada en 2012 por el Departamento de Justicia, acusó a Apple y a varias editoriales de provocar con su supuesta conspiración que los consumidores pagasen "decenas de millones de dólares más" por sus libros electrónicos.
Las editoriales empezaron a decidir el precio de los libros electrónicos y se confabularon para subir el importe, con lo que impidieron que Amazon pudiera seguir vendiendo sus "gangas" a 9,99 dólares, según el Departamento de Justicia. Amazon puso en marcha esa táctica en 2007 para atraer consumidores a su lector Kindle y, gracias a ella, se convirtió en líder indiscutible del mercado, pero las editoriales temieron que provocara también una caída en los precios de las obras impresas.
Ante la salida al mercado del iPad en 2010 y su tienda de libros electrónicos iBookstore, las editoriales "se unieron con Apple, que compartía el mismo objetivo de limitar la competencia en la comercialización de libros electrónicos".
El pacto surtió el efecto deseado ya que los éxitos de ventas pasaron de venderse en su edición digital a 9,99 dólares (9,07 euros) a entre 12,99 y 16,99 dólares (de 11,8 a 15,4 euros), lo que provocó que la cuota de mercado de Amazon bajase notablemente.