Un asesor de Nóos asegura que Urdangarin y Torres se hacían facturas "entre ellos" para desviar dinero
- Dice que Urdangarin y Torres desviaban el dinero de Nóos a sus empresas
- Confirma que tenían empleados ficticios y que todo lo decidían ambos
- Niega haber enviado información a la Casa Real para que supervisara a Nóos
El asesor contable del Instituto Nóos Luis Tejeiro ha declarado este miércoles ante el tribunal que juzga el caso Nóos que Iñaki Urdangarin y su exsocio Diego Torres "se llevaban el dinero que cobraba el Instituto Nóos a sus sociedades" mediante el cruce de facturas que concentraban sobre todo al final de cada ejercicio.
En su declaración por videoconferencia como testigo ante el tribunal de la Audiencia de Palma, Tejeiro ha explicado el método que utilizaban para apropiarse de los fondos públicos cobrados al afirmar: "Sé que se hacían facturas entre ellos para sacar el dinero a sus sociedades".
"Así les llegaba el dinero a los propietarios de las sociedades, a Diego e Iñaki para sus funciones..., para quedárselo, vamos", ha añadido.
Luis Tejeiro ha precisado que cada final de año "había bastantes facturas" entre las sociedades del grupo para repartir a medias entre Urdangarin y Torres los ingresos. "Iban al 50%", ha afirmado.
"Hicieron Nóos Consultoría al 50% porque iban al 50% y en todo el negocio iban al 50%. Incluso al principio había unas tablas que controlar lo que cobraba cada uno, para que se viese que cobraran lo mismo la parte de Iñaki Urdangarin y la parte de Diego Torres, unas tablas Excel que lo controlaban", ha detallado.
Ha contado que esperaban al final del ejercicio y, cuando disponían de un cálculo aproximado de los ingresos que iba a tener el Instituto Nóos, se intensificaba el intercambio de facturas entre las sociedades del grupo.
Tejeiro ha explicado que "hay pocas al principio y más al final porque cuando ya saben el dinero que tienen es cuando hacen más facturas. Un 80 % son del último trimestre del año", ha dicho sobre las facturas entre las distintas sociedades.
Confirma que se contrataban empleados ficticios para Nóos
Tejeiro también ha asegurado en su declaración que Urdangarin y Torres tenían contratados en sus empresas a empleados ficticios para obtener ventajas fiscales. En concreto, los salarios de esos empleados falsos eran cargados a las cuentas de las empresas mediante cheques al portador que se transformaban en dinero en metálico que se quedaban ambos socios.
El testigo, socio de una consultoría que gestionaba la contabilidad y la gestión laboral de las empresas del grupo Nóos, ha relatado a preguntas del fiscal Pedro Horrach que él mismo estuvo empleado al menos en una de las sociedades pero nunca cobró nada por ello y su salario se "ennegrecía" en favor de Torres, que es su cuñado.
Tejeiro ha señalado que, además de él y su hermana Patricia, conoció numerosos casos de empleados ficticios utilizados para alcanzar los mínimos de trabajadores de alta en la Seguridad Social para que las empresas pudieran acogerse a los beneficios de la "amortización libre".
Diego Torres controlaba "todo" el aspecto contable
Las instrucciones para la contratación de estos falsos empleados las daban tanto Torres como Urdangarin, aunque principalmente el primero, que estaba muy involucrado en la gestión del personal, contable y tributaria, ha insistido el testigo. En su declaración, ha subrayado que ambos socios controlaban todas las decisiones, en especial Diego Torres.
"En el tema contable lo controlaba todo hasta el céntimo", ha dicho de Diego Torres, esposo de su hermana Ana María, acusada en la causa junto a su marido y a otro hermano, el también contable Marco Antonio, quien en su declaración también denunció contrataciones ficticias.
Luis Tejeiro ha negado que su hermano Marco Antonio tuviera ninguna capacidad de decisión dentro de las empresas de Torres e Urdangarin: no tenía autonomía ni tenía ninguna capacidad de decisión, al igual que su hermana, mujer de Diego Torres. "Mi pobre hermana en este tema no tiene nada que ver. Ni pincha ni corta. Aguanta lo que aguanta", ha llegado a asegurar.
"Cualquier persona que haya trabajado con Diego Torres sabe que el control es exhaustivo y no da lugar a mucha autonomía. En lo que yo conozco, el tema contable, estábamos supervisados continuamente", ha insistido.
Luis Tejeiro ha dicho también que se utilizaban distintas empresas de la sociedad, como la sociedad De Goes, radicada en Londres, para enviar dinero fuera del país y que el control absoluto de estas empresas correspondía a Diego Torres, al igual que la contabilidad de Aizoon, la sociedad mercantil compartida al cincuenta por ciento por Urdangarin y su esposa, la infanta Cristina.
No pasó información a la Casa Real de Nóos y Aizoon
Este contable y gestor fiscal de Nóos ha negado también haber remitido información a la Casa Real para que supervisaran su actuación y la de Aizoon. De hecho, ha afirmado no conocer ni al entonces secretario de las infantas, Carlos García Revenga, ni al funcionario Federico Rubio Carvajal, de quien Torres y Urdangarin explicaron en sus comparecencias que hacía las declaraciones de Hacienda de la infanta Cristina y revisaba las de sus empresas.
Luis Tejeiro ha confirmado que la declaración del IRPF de Torres y Urdangarin en esos años la hacía Miguel Tejeiro, a quien ambos describieron como su asesor fiscal. También realizaba la declaración de Ana María Tejeiro, la esposa de Torres, pero ha dicho que no sabía quién hacía la de la infanta Cristina. "Quién la realizaba no lo sé, Miguel Tejeiro no", ha recalcado.
También ha declarado, por videoconferencia, un trabajador del bufete que realizaba la contabilidad y gestión laboral de las empresas que eran propiedad de Urdangarin y Torres, quien ha contado al tribunal que, a veces, la documentación de esas sociedades la llevaban en sobres a su oficina escoltas del marido de la infanta. Medina ha detallado que a veces los escoltas eran quienes llevaban la documentos al despacho y también los recogían, una tarea que en otras ocasiones hacían mensajeros.
Molinero: "Había dos jefes y luegos estábamos los que trabajábamos"
Otro de los testigos citados esta jornada era el exempleado de Nóos Consultoría Juan Carlos Molinero, en quien Urdangarin y Torres también han derivado responsabilidades de las negociaciones de los distintos convenios rubricados por el Instituto con las Administraciones públicas.
Sin embargo, en su declaración, Molinero, contratado para dirigir el márketing del equipo ciclista Illes Balears-Banesto, ha negado haber intervenido en la negociación del contrato con Nóos y ha sintetizado en el juicio cómo era la estructura organizativa del conglomerado de empresas: "En Nóos había dos jefes y luego estábamos los que trabajábamos".
"Al punto de que nos autodenominábamos los indios, y estábamos sentados en la pradera", ha añadido Molinero, contratado en octubre de 2003 para gestionar el márketing del equipo ciclista después de que el marido de la infanta Cristina mediara para que el Govern balear patrocinara al antiguo Banesto. En su declaración ha explicado que la falta de posibilidades de promoción fue determinante para que decidiera abandonar Nóos.
"En Nóos no se movía un papel, un presupuesto, un documento, un contrato, un algo, sin que lo supervisasen los jefes de la empresa", ha recalcado.
El tribunal ha aplazado para este jueves la declaración como testigo prevista para este miércoles de Miguel Tejeiro, que fue secretario del Instituto Nóos y a quien Urdangarin y Torres han atribuido prácticas ilegales de las que están acusados ellos.
La jornada comenzará con la declaración de dos testigos por videoconferencia, Ferran Llauradó y Antonio Ballabriga, ambos extrabajadores de Nóos, tras los cuales declarará Miguel Tejeiro, según ha anunciado la presidenta del tribunal, Samantha Romero, acerca del nuevo cambio de calendario.