Josep María Álvarez, nuevo secretario general de UGT al obtener el 51,1 % de los votos
- Se ha impuesto a Miguel Ángel Cilleros por 17 votos
- Tras 26 años al frente del sindicato en Cataluña, salta al ámbito nacional
- Técnico en La Maquinista, es afiliado de la UGT desde el año 1975
El 42º Congreso Confederal de UGT ha elegido como nuevo líder a Josep María Álvarez, hasta ahora secretario general del sindicato en Cataluña.
Álvarez ha obtenido el 51,1% de los votos de los 599 delegados y ha superado en 17 votos a su contrincante, Miguel Ángel Cilleros.
Con la elección de Álvarez, en un larguísimo proceso de votación que comenzó pasadas las doce de la noche y culminó a las cinco de la madrugada, se pone fin a la etapa de Cándido Méndez al frente de UGT, tras 22 años liderando el sindicato.
Dos factores jugaban en su contra, su veteranía, el próximo 20 de marzo cumplirá 60 años, y su defensa del derecho a decidir, que ha levantado algunas ampollas en la organización.
La Comisión Ejecutiva está formada por siete hombres y seis mujeres, e incorpora a la secretaria general de UGT en La Rioja, Cristina Antoñanzas, como vicesecretaria general y a su homólogo valenciano, Gonzalo Pino, como responsable de Política Sindical.
La lista de Álvarez incorpora a cinco cargos provenientes de UGT en Cataluña e incluye al vicesecretario general, Diego Martínez, a la responsable de Formación, Adela Carrió y a Amparo Burgueño (federación de enseñanza) como secretarios confederales sin un área específica. Además Salvador Duarte, responsable de la organización de autónomos de UGT en Cataluña CATC, es ahora el tesorero.
El resto de miembros son Rafael Espartero, como secretario confederal de Organización; Carmen Barrera, al frente de la Secretaría de Políticas Sociales, Empleo y Seguridad Social; Ana García, responsable del área de Salud Laboral y Medio Ambiente; Sebastián Pacheco, como secretario confederal de Formación; Jesús Gallego, en la Secretaría de Internacional e Isabel Araque, cuarta secretaria confederal.
Toda una vida en Barcelona
Josep María Álvarez, asturiano, nació en Alvariza en Belmonte de Miranda en 1956 y cursó estudios de formación profesional en Noreña, pero prácticamente toda su vida profesional se ha desarrollado en Barcelona, donde se trasladó con 19 años de edad.
En 1975 comienza a trabajar como técnico en La Maquinista Terrestre y Marítima (Gec-Alsthon). Ese mismo año se afilia a la Unión General de Trabajadores, donde tiene el primer contacto con la realidad social y se interesa por aprender el catalán. Un año después es elegido secretario de Acción Sindical en la sección sindical y miembro del comité de empresa desde las primeras elecciones sindicales.
En 1980 se convierte en secretario de organización de la Federación del Metal de UGT de Cataluña y más adelante en secretario general del Sindicato del Metal de Barcelona, la central con más afiliados de la Confederación. En 1988 vuelve a ser reelegido y ocupa un cargo en el Comité Confederal. En 1989 pasa a ser presidente de la Comisión Gestora de UGT de Cataluña.
26 años al frente de UGT en Cataluña
En mayo de 1990 el 8º Congreso de la UGT de Cataluña lo elige como secretario general y vuelve a ser reelegido en los siguientes congresos, con lo que lleva 26 años al frente de la organización en Cataluña.
En 1993 impulsa la creación de la Asociación Sindical Interregional de los 4 Motores para Europa, donde se encuentran integrados los sindicatos de Cataluña, de Lombardía, de Baden Württemberg y de Ródano-Alpes, afiliados a la Confederación Europea de Sindicatos.
Dentro del sindicato ha creado servicios específicos como AMIC (Asociación de Ayuda Mutua de Inmigrantes en Cataluña), CTAC (Confederación de trabajadores Autónomos de Cataluña) y Avalot (Jóvenes de UGT de Cataluña).
Álvarez entiende el catalán como un derecho de los trabajadores, como un elemento para garantizar y potenciar la cohesión social, por lo que ha impulsado Las noticias de lengua y trabajo -publicación que salió por primera vez en el año 1997- y las Jornadas Lengua, Trabajo y Sociedad -cuya primera edición se celebró en 1996 en Barcelona. Ambos proyectos están auspiciados por la UGT de Cataluña y la UGT de las Baleares.
Por su labor en el impulso de la lengua y cultura catalana en el ámbito sindical, ganó el premio de Honor Lluís Carulla en 2003 y desde 1995 es miembro del Consejo Social de la Lengua Catalana a propuesta del Consejo de Trabajo. Además es asesor de la empresa eléctrica Endesa.
Tras su trayectoria de 26 años de dirigente ugetista en Cataluña ahora salta al ámbito nacional y afronta el reto de modernizar la organización en toda España. Ante el plenario, Álvarez ha terminado su intervención con un verso del poeta y trabajador textil Miquel Martí i Pol, que resume el talante con el que comienza su andadura al frente del sindicato: "Todo está por hacer y todo es posible".