Las familias de las víctimas españolas del siniestro de Germanwings piden cambios legales
- Argumentan que el sistema de control de los pilotos "ha fallado enormemente"
- Hacen referencia al informe de la Oficina de Investigación y Análisis de Francia
- Este mismo informe ha pedido reforzar el control médico de los pilotos
- Lee el comunicado íntegro de las familias de las víctimas
- Las claves del siniestro de Germanwings
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La Asociación de Afectados del Vuelo GWI 9525 en los Alpes, que reúne a familias de las víctimas españolas de esa tragedia (50 de los 150 pasajeros, todos ellos fallecidos), han pedido este domingo a las instituciones que lleven a cabo los "cambios legales necesarios" tras ver "acreditado" que el sistema de control de los pilotos "ha fallado enormemente" en este caso.
En un comunicado, esta asociación se ha referido así al informe elaborado por la Oficina de Investigación y Análisis de Francia (BEA), encargada de las pesquisas sobre el vuelo de Germanwings estrellado el pasado 24 de marzo en los Alpes franceses. [Lee el comunicado íntegro de las familias de las víctimas]
Dicho informe, que se ha presentado públicamente este domingo, si bien se dio a conocer ayer a las familias, ha confirmado que el accidente fue provocado y ha pedido reforzar el control médico de los pilotos.
En un comunicado, esta asociación cree que el informe acredita "que el sistema que hasta ahora estaba en funcionamiento ha fallado enormemente".
"Las instituciones públicas y privadas tienen la obligación de velar por la seguridad de todos nosotros y en este caso se evidencia que no ha sido así", sostiene dicha asociación, que nació en julio del año pasado de la mano de 45 familias de víctimas de ese vuelo.
"No se puede primar la privacidad de un individuo en perjuicio de la seguridad"
"Apelamos a las instituciones públicas que nos representan a hacer los cambios legislativos necesarios para salvaguardar nuestra seguridad. No se puede primar la privacidad de un individuo en perjuicio de la seguridad global", sentencia la nota, que reclama asimismo que "se tomen las medidas necesarias para que las empresas cumplan con la obligación de tener mecanismos eficientes de control de sus empleados".
El informe final de la investigación de seguridad, divulgado este domingo, mantiene que el alemán Andreas Lubitz, que sufría depresión, modificó intencionadamente los ajustes del piloto automático para que el aparato descendiera y no respondió ni a las llamadas de los controladores ni a los golpes en la puerta de la cabina.
En ese documento, la BEA pide, entre otras cosas, que se exija un seguimiento médico a los pilotos con antecedentes psicológicos o psiquiátricos y que se alcance un "mejor equilibrio" entre el mantenimiento del secreto médico y la seguridad pública.
La Asociación de Afectados del Vuelo GWI 9525 en los Alpes recuerda que este informe incluye recomendaciones sobre seguridad dirigidas a la OMS, a la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), a la Comisión Europea, a la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA), al ministerio Federal de Transportes e Infraestructuras Digitales (BMVI) y a la Asociación Médica Alemana (BÄK).