Obama designa al juez Merrick Garland como candidato a sustituir a Scalia en el Tribunal Supremo
- Garland es actualmente el jefe de la Corte de Apelaciones de Washington
- Desde 1994 y hasta su nombramiento como juez, Garland fue vicefiscal general
- La sustitución de Scalia ha generado polémica al plantearse en plena carrera electoral
Merrick Garland de 63 años será el juez propuesto por Barack Obama para sustituir al fallecido Antonin Scalia en el Tribunal Supremo de los Estados Unidos. Así lo ha confirmado este miércoles la Casa Blanca en un comunicado. "Nadie está mejor cualificado para entrar inmediatamente al servicio de la Corte Suprema", afirma el texto.
Tanto Garland como el juez de origen indio Sri Srinivasan, figuraban como favoritos en las quinielas de los medios de comunicación norteamericanos. A ambos les une una reputación de moderados, rasgo que les pondría en el punto de mira de Obama. En 2009, el magistrado Garland también fue considerado por Obama para el puesto, aunque la elegida final fue Sonia Sotomayor, primera juez hispana en el máximo tribunal.
Garland cuenta con el respeto de los legisladores afines a ambos partidos y actualmente es el jefe de la Corte de Apelaciones de Washington, donde ha estado destinado tras ser propuesto por el presidente demócrata Bill Clinton en 1997 y confirmado posteriormente por amplia mayoría. Anteriormente trabajó en el departamento de Justicia estadounidense bajo la administración del mismo presidente.
Un juez brillante y "neutral"
Considerado brillante y un modelo de juez "neutral", Garland obtuvo en 1997 la aprobación de una buena parte de los republicanos del Senado y, por eso, ahora los conservadores tendrían muy difícil justificar un bloqueo.
Un alto cargo de la Casa Blanca ha dicho a Efe que Merrick tiene "más experiencia judicial en el ámbito federal que ningún otro designado para el Tribunal Supremo en la historia" de EEUU.
Nacido en 1952 en Chicago, Garland tiene experiencia en el sector privado y público.
Desde 1994 y hasta su nombramiento como juez, Garland fue vicefiscal general y se encargó de supervisar el procesamiento de los autores del atentado de 1995 en Oklahoma City, en el que murieron 168 personas.
Nombramiento polémico en tiempo de elecciones
Encontrar un sustituto para Scalia se ha convertido en un tema central de la campaña para las elecciones presidenciales de noviembre, pues el nuevo magistrado podrá moldear leyes y decidir sobre temas tan importantes como el aborto o el derecho a portar armas.
Horas después de la muerte del juez y con la bandera de Estados Unidos izada a media asta en el Tribunal Supremo, los legisladores abrieron la batalla para nombrar al sucesor del magistrado. Debe ser nominado por el presidente del país, pero necesita obtener la confirmación del Senado, de mayoría republicana, un apoyo complicado en plena carrera electoral y la presidencia de Obama con los días contados.
El líder de los conservadores en la Cámara Alta, Mitch McConnell, amenazó con vetar a cualquier sustituto que proponga el actual presidente al considerar que su sucesor debe elegir al nuevo juez, y por tanto, el asiento de Scalia debe permanecer vacío hasta que el mandatario deje la Casa Blanca.
A pesar de la amenaza de veto de los republicanos del Senado, Barack Obama había anunciado que propondría un nuevo juez para la Corte Suprema antes de dejar la Casa Blanca. "Tengo la intención de cumplir con mi obligación constitucional y nominar un sucesor", dijo el presidente de Estados Unidos en una rueda de prensa.
Un equilibrio frágil, entre conservadores y progresistas
Las especulaciones sobre el juez finalmente elegido por el presidente se han ido reduciendo a dos nombres, Sri Srinivasan y Merrick Garland, ambos pertenecientes a la Corte de Apelación del distrito de Columbia -como el fallecido Scalia- y Paul Watford, del 9º circuito, según el diario Washington Post.
Durante sus dos mandatos, Obama ha nombrado a dos juezas de perfil progresista: Elena Kagan, judía y designada por el mandatario en 2010, y Sonia Sotomayor, católica, divorciada y la primera latina del alto tribunal.
El Tribunal Supremo de EE.UU. debe estar formado por nueve jueces, con cargos vitalicios, y hasta ahora se mantenía un equilibrio entre el número de conservadores y progresistas, por lo que un nuevo nombramiento de Obama podría inclinar la batalla a favor de los progresistas, según algunos analistas.
El Tribunal Supremo de Estados Unidos es una parte esencial de la separación de poderes del sistema político, y a lo largo de la historia ha tomado decisiones cruciales, como la legalización del matrimonio homosexual en todo el país y el fin de la segregación racial en las escuelas.
El nombramiento de un nuevo juez, con el poder de moldear las leyes de Estados Unidos, llega en un momento crucial para el país, inmerso en un competitivo proceso de primarias para nombrar al aspirante demócrata y republicano que competirá por la Casa Blanca en las elecciones presidenciales de noviembre de este año.
Designado para el Tribunal Supremo en 1986 por el entonces presidente, Ronald Reagan, el juez Antonin Scalia fue hallado muerto a los 79 años, aparentemente por causas naturales, en su residencia privada, según el Cuerpo de Alguaciles de EE.UU. En 2011 Scalia fue considerado por el magistrado Richard A. Posner como "el jurista más influyente del último cuarto de siglo".