El Gobierno británico retira algunos de los recortes a discapacitados que originaron la crisis
- El ministro de Trabajo dimitió por ver "indefendibles" los recortes de estas ayudas
- Su sucesor argumenta que "detrás de cada estadística hay un ser humano"
El Gobierno británico no seguirá adelante con algunos de los cambios planeados en los recortes a las prestaciones por discapacidad incluidos en su nuevo presupuesto, ha afirmado en el parlamento el nuevo ministro de Trabajo y Pensiones, Stephen Crabb.
El nuevo titular de Trabajo reemplaza en esa cartera a Iain Duncan Smith, quien dimitió el pasado viernes por no estar de acuerdo con los recortes del Ejecutivo de David Cameron a las ayudas a los discapacitados, anunciados el pasado miércoles.
En una intervención en la Cámara de los Comunes, Cameron defendió a su titular de Economía, George Osborne, muy cuestionado tras los recortes de 5.500 millones de euros incluidos en el nuevo presupuesto, que podrían haber perjudicado a más de 600.000 personas con invalidez.
"Debemos continuar recortando el déficit, controlando los costes del sistema de bienestar y vivir dentro de nuestras posibilidades", enfatizó el líder conservador británico. Posteriormente, Crabb informó de que el Ejecutivo no proseguirá con algunos de esos cambios planeados, que fueron los que dieron lugar a la crisis de gobierno.
"No continuaremos con los cambios que se habían dispuesto (con relación a los llamados Pagos a la Independencia Personal)", indicó Crabb, al subrayar que "un sistema de bienestar justo y compasivo no debería centrarse simplemente en los números".
“Detrás de cada estadística se encuentra un ser humano“
"Detrás de cada estadística se encuentra un ser humano y quizás, a veces, en los Gobiernos los olvidamos", reconoció el político. Esa frase del nuevo titular de Trabajo sugiere que el Ejecutivo no irá más allá de las reducciones ya planeadas en la llamada Ley de Trabajo y Reforma del bienestar.
Supervisión de los gastos del bienestar
En su comparecencia, Crabb señaló también que la llamada Oficina de Responsabilidad Presupuestaria revisará el próximo otoño el nivel de esos límites al bienestar. "Es correcto que supervisemos con cuidado los gastos de bienestar", dijo.
Crabb también consideró que "el principio de introducir un límite al bienestar es lo correcto, teniendo en cuenta los enormes incrementos en gasto en bienestar bajo los previos Gobiernos laboristas". "La realidad es que si no controlamos las finanzas públicas, siempre pagarán el más alto precio los más pobres de la sociedad. Por lo que necesitamos disciplina", agregó.
Iain Duncan Smith abandonó su puesto el pasado viernes, provocando una crisis en el seno del partido tory, al considerar "indefendibles" los recortes a las ayudas sociales que incluye el presupuesto presentado la pasada semana por Osborne.
Duncan Smith, que ocupaba la cartera desde mayo de 2010, hizo pública una carta de renuncia en la que sostiene que las rebajas en las ayudas a los discapacitados "son indefendibles dentro de un presupuesto que beneficia a los contribuyentes que más ganan".