Bélgica hace autocrítica por la gestión de su seguridad nacional y reforma sus leyes
- Bruselas reconoce negligencia en la gestión de información con al Bakraoui
- El gobierno belga admite torpeza en la investigación y detención de Salah Abdeslam
- El Legislativo reformará las leyes para permitir acceso a información y registros
- Qué se sabe hasta ahora de los atentados de Bruselas
El ministro belga del Interior, Jan Jambon, ha admitido este viernes que hubo negligencia en la gestión del caso de Ibrahim El Bakraoui, uno de los presuntos autores de los atentados que el martes dejaron en Bruselas un balance de 31 muertos y centenares de heridos. Jambon ha considerado "inaceptable" que no se hiciese "nada esencial" entre su detención en Turquía y su deportación a Holanda.
El Bakraoui fue detenido por las autoridades turcas que lo etiquetaron como "combatiente en Siriay lo deportaron a Holanda en un procedimiento aún cuestionado. La realidad es que el terrorista estaba señalado suficientemente y no se hizo nada. "Alguien ha sido negligente, no ha sido suficientemente proactivo, ni comprometido con un dossier donde desde el principio podíamos notar que se trataba de terrorismo", ha dicho Jambon en una comparecencia ante el Parlamento belga.
El ministro reconoce que "no hace falta ser superactivo" para comprender que "hay un riesgo muy elevado" de que alguien con el perfil de El Bakraoui -condenado a diez años, encarcelado durante varios años, que parte a Siria y que es atrapado en la frontera turcosiria- puede ser un combatiente extranjero. "Desde el 26 de junio, el momento en el que se nos informó, y el 20 de julio -el momento en el que El Bakraoui fue trasladado en avión a Holanda-, el oficial de enlace no hizo nada esencial", añade.
Bélgica reforma sus leyes para evitar el error con Abdeslam
Recapitulando, pocos días atrás, la captura de Salah Abdeslam, uno de los autores de los atentados del 13N en París, también dejó perplejos a autoridades y opinión pública. El terrorista más buscado en Europa durante cuatro meses estaba escondido en Molenbeek, su barrio bruselense, a pocos metros del ayuntamiento y de una de las mayores comisarías de Bruselas.
Pero no es todo. Tras intervenir en la matanza de París, Abdeslam consiguió huir y cruzar a la capital belga franqueando varios controles policiales. Posteriormente, se frustró su captura en una operación policial abortada por una ley que impide los registros en las casa entre las 21:00 y las 5:00. Algo inaceptable teniendo en cuenta que el alto nivel de alerta antiterrorista en el que el país se hallaba.
Este viernes el Parlamento belga ha iniciado los trámites para aprobar el próximo martes una ley que permita los registros policiales durante las 24 horas del día y la puesta en marcha de una base de datos de "combatientes extranjeros" compartida por todas las fuerzas de seguridad del país.
Registros nocturnos y bases de datos
El ministro de Justicia belga, Koen Geens, ha explicado que la reforma legal permitirá también los registros nocturnos ante presuntos delitos de terrorismo y ante evidencias significativas de posesión de armas prohibidas, explosivos o sustancias peligrosas.
Otro de los cambios significativos del proyecto de ley en la Cámara baja belga es la puesta en marcha de un banco de datos conjunto al que estarán conectados todos los servicios estatales implicados en la lucha antiterrorista, como la policía, los servicios secretos y el Órgano de Coordinación para el Análisis de la Amenaza (OCAM).
En concreto, esta iniciativa pretende que las fuerzas de seguridad compartan toda la información relativa a las personas sospechosas de haber marchado a Siria a combatir con el grupo yihadista Estado Islámico, los llamados "combatientes extranjeros". Este instrumento informativo ya existe, explicó ante el Parlamento el ministro de Interior, Jan Jambon, pero no está lo suficientemente "estructurado" en la actualidad.
El proyecto de ley prevé que los datos se guarden hasta un máximo de 30 años y que su conservación se evalúe cada tres años. La normativa contempla además que se pueden realizar escuchas telefónicas en Bélgica para casos de tráfico de armas.
La colaboración de Interpol
Interpol ha anunciado este viernes que ha puesto a disposición de las autoridades belgas apoyo analítico y operativo para ayudar a identificar los potenciales vínculos entre los ataques en Bruselas y otras personas y atentados en el mundo.
La organización policial internacional ha destacado en un comunicado que destinará sus esfuerzos a localizar a dichos individuos y proceder a su detención dentro de su operación Infra, que tiene entre sus objetivos la actualización de las bases de datos de los países sobre sospechosos y personas buscadas.
También analizará el tipo de explosivos utilizado y se centrará en el análisis de documentos de viaje robados o perdidos. En respuesta a los atentados del martes pasado en Bruselas, el secretario general de la organización, Jürgen Stock, ha señalado que se ha desplegado el Equipo de Respuesta a Incidentes (IRT) para ayudar a su identificación.