El Ejército sirio arrebata al EI el control de antigua ciudadela de Palmira
- La UNESCO ha celebrado la "liberación" del enclave arqueológico
- Los ataques se han desarrollado con cobertura aérea rusa y gubernamental
- El Estado Islámico ocupó la ciudad en mayo, destruyendo parte de los monumentos
El Ejército sirio ha arrebatado al grupo terrorista Estado Islámico (EI) el control de la antigua ciudadela de la ciudad monumental de Palmira, en el este de la provincia central de Homs. El logro es parte de los avances frente al grupo terrorista Estado Islámico (EI), que conquistó esta zona en mayo.
Así lo ha confirmado a EFE el responsable político Talal al Barazi, gobernador de la provincia central de Homs, donde se ubica Palmira. Al Barazi ha destacado que los soldados también retomaron en la periferia el llamado monte de Syriatel, donde hay una torre de telecomunicaciones, y han progresado hasta situarse a solo 500 metros del aeropuerto de la población.
"Los enfrentamientos se han concentrado hoy en áreas de los alrededores, al norte, oeste y suroeste de Palmira. Estamos trabajando para destruir los artefactos explosivos que los terroristas del EI han colocado para impedir el paso del Ejército", ha explicado el gobernador.
Los soldados lograron entrar ayer en el sur de Palmira, donde libraron combates contra sus enemigos, y este martes han irrumpido en el barrio de Al Mutaqaidín, en el noroeste, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
La ONG ha subrayado que las Fuerzas Armadas nacionales están respaldadas en esta ofensiva por asesores rusos y la Brigada de los Fatimíes, un grupo integrado por milicianos chííes procedentes de Afganistán y de otros Estados asiáticos.
Cobertura aérea rusa, y gubernamental
Estos efectivos terrestres cuentan con la cobertura aérea de la aviación siria y de la rusa, que están bombardeando posiciones del EI en Palmira y sus cercanías.
El activista Abul Mayed al Tadmuri, de la Coordinadora de la Revolución en la Ciudad de Palmira, reveló a Efe por internet que las autoridades sirias centran su estrategia en los bombardeos antes de acceder a la población.
Por su parte, el EI "se defiende con operaciones de precisión" en las que trata de infiltrarse en las filas del régimen para llevar a cabo atentados con explosivos, ha apuntado Al Tadmuri, desde fuera de Palmira, aunque tiene contacto con activistas de su organización que sí que están dentro.
La liberación de un tesoro arqueológico
La directora general de la UNESCO, Irina Bokova, saludó la "liberación" del enclave arqueológico de Palmira. "La UNESCO está preparada para ir rápidamente hasta allí junto a responsables sirios de antigüedades, en cuando las condiciones de seguridad lo permitan, en una misión de evaluación de los daños y de protección del patrimonio inestimable de la ciudad", ha subrayado.
El pasado 20 de mayo, el EI ocupó Palmira, cuyas ruinas grecorromanas son Patrimonio Mundial de la Unesco, tras una ofensiva en la que conquistó amplias partes de Homs, fronteriza con la provincia iraquí de Al Anbar.
Al Barazi reiteró hoy que por el momento los enfrentamientos transcurren lejos de dichas ruinas, situadas al sureste de la urbe. La ciudadela de Fajr Edin al Maani, del siglo XIII d.C. , cuyo control recuperaron hoy las autoridades, se encuentra al noreste de Palmira.
Conocida como "la novia del desierto" y localizada en un oasis, Palmira fue en el pasado uno de los centros culturales más importantes del mundo antiguo y punto de encuentro de las caravanas en la Ruta de la Seda.
Monumentos destruidos por el Estado Islámico
Desde que el EI se hizo con su dominio ha dinamitado tres torres funerarias del siglo I d.C., el Templo de Bel, tres torres funerarias del siglo I d.Cel Templo de Belel Templete de Bal Shamin y el Arco de Triunfo
El teatro romano de Palmira ha sido empleado por los extremistas como escenario para asesinar a sus prisioneros, como ocurrió en julio, cuando 25 soldados sirios fueron ejecutados a tiros por menores de edad reclutados por el EI.
El asalto del Ejército sirio a Palmira coincide con una intensificación de las operaciones contra el EI en Siria e Irak tras los atentados de hace tres días en Bruselas, que causaron 31 muertos y más de 300 heridos y que fueron reivindicados por esta organización terrorista.