Armenia advierte de una "guerra a gran escala" si continúa el conflicto con Azerbaiyán en Nagorno Karabaj
- Azerbaiyán alerta a su ejército ante un posible ataque a la capital de Nagorno Karabaj
- Desde el grupo negociador de Minsk, EE.UU y Rusia intentan restablecer la paz
- Armenia ha amenazado con reconocer la independencia de Nagorno Karabaj
Azerbaiyán ha puesto este lunes en máxima alerta a su ejército para lanzar un ataque contra la capital del enclave de Nagorno Karabaj, Stepanakert, en caso de que las tropas armenias sigan bombardeando su territorio. Y lo hará "si en un plazo breve de tiempo el enemigo no cesa sus bombardeos contra las áreas pobladas", afirma el responsable de Defensa azerbaiyano en un comunicado.
"El ministro de Defensa ha ordenado a todas las unidades, incluido los destacamentos de artillería, que estén preparados para asestar demoledores ataques con armamento pesado contra Jankendi (Stepanakert) y otras ciudades azerbaiyanas ocupadas", ha informado el ministerio de Defensa.
"¡Que lo intenten!", ha replicado desafiante Artsrun Ovanisián, portavoz del ministerio de Defensa armenio. Esta retórica belicista, sumada al recrudecimiento de los combates en varios lugares de este auténtico polvorín caucásico, ha levantado todas las alarmas en Rusia, EEUU y Francia, los encargados de supervisar el alto el fuego en vigor desde 1994.
Recrudecimiento de los combates
Tras los choques armados registrados el fin de semana entre armenios y azerbaiyanos, los combates se ha recrudecido en la frontera del enclave de Nagorno Karabaj, según han informado este lunes fuentes militares de ambos bandos en conflicto.
"En las últimas horas como resultado de las acciones de respuesta del Ejército azerbaiyano fueron eliminados hasta 170 soldados y destruidos doce blindados del enemigo", ha afirmado el Ministerio de Defensa de Azerbaiyán. Según la fuente oficial, las tropas armenias y de armenios karabajíes cayeron presas del pánico y abandonaron sus armas y pertrechos al verse superadas por las unidades azerbaiyanas.
Mientras, el Ejército azerbaiyano habría sufrido numerosas bajas al intentar romper las líneas karabajíes, cuyas milicias habrían destruido cinco tanques T-90, con lo que ascenderían a 25 los abatidos desde el estallido el sábado de las acciones militares.
El viejo conflicto de la comuniad armenia
El actual conflicto estalló en 1988, cuando, la entonces región autónoma azerbaiyana de Nagorno Karabaj, de población mayoritariamente armenia, pidió su incorporación en la República Soviética de Armenia, lo que desembocó en repentinos brotes de violencia étnica.
La autoproclamada república de Nagorno Karabaj, que tiene menos de 200.000 habitantes, en su gran mayoría armenios, acusa a Azerbaiyán de incumplir su propio anuncio unilateral de cese del fuego.
El presidente de Armenia, Serge Sargsián, ha amenazado este lunes con reconocer la independencia del enclave de Nagorno Karabaj. "Si las acciones militares continúan y desembocan en acciones militares a gran escala, Armenia reconocerá la independencia de la República de Nagorno Karabaj", ha dicho Sargsián, según ha informado la Presidencia armenia.
Previamente, Sargsián ha propuesto el cese de las hostilidades por el control del enclave, una vuelta al alto el fuego de 1994, aunque condicionado a que todos los bandos regresen a sus posiciones iniciales.
De lo contrario, ha advertido, "una mayor escalada de las acciones militares puede acarrear consecuencias imprevisibles e irreversibles, incluida una guerra a gran escala", que conduciría al reconocimiento de la región como independiente.
La Cancillería azerbaiyana ha asegurado que está dispuesta a aceptar un alto el fuego, pero antes las tropas armenias deben abandonar el Karabaj y la franja de territorios que ocupan en Azerbaiyán, acatando las resoluciones de la ONU. Sargsián ha criticado la pasividad de la comunidad internacional cuando Bakú presumía de su arsenal militar y enarbolaba la amenaza de una solución militar para el conflicto.
Una de las fronteras más militarizadas del mundo
Azerbaiyán únicamente ha admitido hasta ahora 12 bajas en sus filas, mientras Armenia cifra en 18 el saldo mortal. En cuanto a los civiles, Azerbaiyán enterró el domingo a dos jóvenes, mientras las autoridades karabajiíes informaron hoy de cuatro muertos. Ambos bandos se acusan de atacar las áreas pobladas a ambos lados de la frontera, una de las más militarizadas del mundo.
El domingo, Azerbaiyán suspendió unilateralmente las acciones militares, pero sigue combatiendo, y se niega a ceder los puntos estratégicos de Nagorno Karabaj que retomó el sábado.
La toma de esas cinco colinas y dos localidades permitió al presidente de Azerbaiyán, Ilham Alíev, clamar el domingo la mayor victoria militar de su país sobre su mayor enemigo desde el fin de la guerra que dejó más 25.000 muertos (1992-94). Reivindicaciones que ahora, en ambos bandos, también se hacen en redes sociales, también invadidas por el conflicto.
La mediación de Rusia y EE.UU.
Rusia, Estados Unidos y Francia han exigido a armenios y azerbaiyanos que cesen inmediatamente las hostilidades en el enclave de Nagorno Karabaj, ha asegurado este lunes Serguéi Lavrov, ministro de Exteriores ruso.
"Seguimos en contacto con Bakú y Ereván para que, de una vez por todas, sean escuchadas las señales de Moscú, Washington y París", ha dicho Lavrov en rueda de prensa.
Las tres potencias, que presiden el Grupo de Minsk de mediación en el conflicto, han expresado "la necesidad de cesar inmediatamente las violaciones del alto el fuego", en vigor desde 1994.
Además, conminaron a armenios y azerbaiyanos "a no crear dificultades para la reanudación de los esfuerzos para el arreglo pacífico del conflicto".
Turquía, otro actor sensible al conflicto armenio
Lavrov se ha opuesto terminantemente a cualquier cambio en el mecanismo de mediación y arreglo en vigor desde que entrara en vigor en 1994 el alto el fuego que puso fin a una guerra que dejó más de 25.000 muertos. El responsable de Exteriores ruso también ha denunciado los intentos de torpedear las negociaciones de paz por parte de aquellos "a los que no satisface el mecanismo para el arreglo en Nagorno Karabaj".
Y ha recordado que los documentos suscritos en los últimos años con mediación de esos tres países abogan exclusivamente por medios "pacíficos y políticos para el arreglo del conflicto, que no puede tener una solución militar". Con todo, el ministro matizó que "no estamos acusando a ninguno de los actores externos de que justo ellos fueron los que provocaron la actual escalada de tensión y tampoco culpamos a Turquía".
Precisamente, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogán, aseguró el fin de semana que su país apoyará "hasta el final" a Azerbaiyán y criticó la mediación del Grupo de Minsk, motivo por el que Ereván le acusó de alentar los agresivos planes militares de Bakú.