'El héroe de Berlín' glosa la leyenda de Jesse Owens
- El filme de Stephen Hopkins trata la vida personal y deportiva del atleta
- RTVE.es te ofrece un clip exclusivo con Stephan James, el protagonista
- Jesse Owens ganó cuatro medallas en los Juegos de Berlín en 1936
- El corredor de Alabama sufrió las leyes de segregación racial en EEUU
El nombre de Jesse Owens es sinónimo de leyenda. El atleta negro se alzó con cuatro medallas de oro en los Juegos Olímpicos de Berlín en 1936, y asombró al mundo con su extraordinaria velocidad. Una gesta deportiva e histórica.
Owens tumbó las tesis de Hitler sobre la superioridad de la raza aria en pleno auge del nazismo. Cuentan las crónicas, no del todo confirmadas, que, furioso, el dictador abandonó el palco para negarle el saludo al corredor, nacido en una finca de algodón en Alabama.
El héroe de Berlín (Race), dirigida por Stephen Hopkins, y protagonizada por el casi desconocido Stephan James (visto en Selma), traslada a la pantalla la excepcional trayectoria vital de Owens, y este episodio único a las puertas de la II Guerra Mundial. El filme llega a los cines españoles el 15 de abril.
Hasta el momento, no se había realizado ninguna película sobre la hazaña del corredor, que, paradójicamente, fue un paria en un EEUU marcado por el racismo. Owens obtuvo mayor reconocimiento en Europa.
La cinta de Hopkins se aleja del ‘biopic’ estrictamente deportivo para enfocarse en los tres años anteriores a la participación de Jesse Owens en los Juegos: su paso por la universidad de Ohio, con una fuerte tensión racial de fondo, las dudas del atleta sobre el boicot a las Olimpiadas o sus devaneos personales.
Toda esta mezcla está imbricada en el argumento, hasta alcanzar el momento de máxima tensión con las pruebas de atletismo en pleno corazón de la Alemania nazi, que convertirían a Owens en el mayor símbolo del espíritu olímpico.
Héroe en Berlín, paria en EEUU
El filme también rescata una cuestión interesante y algo olvidada: Jesse Owens fue considerado un héroe, un millón de personas le aclamaron a su vuelta de Berlín, pero a la vez sufrió en carne propia las leyes de segregación racial que discriminaban a los ciudadanos de raza negra en una América que renacía de sus cenizas tras la Gran Depresión.
A pesar de sus éxitos, el deportista sufrió el ninguneo de las autoridades estadounidenses que no reconocieron sus logros hasta décadas después. Owens consagró su existencia a ayudar a jóvenes sin recursos, y consiguió sobrevivir impartiendo discursos motivacionales por todo el país.
La película ensalza el valor de la amistad, y la capacidad de Owens, en un símil deportivo, para superar un obstáculo tras otro; el atleta también encara todo tipo de conflictos personales y familiares que nos acercan al lado más humano del personaje.
Con estos mimbres, la trama histórica queda algo eclipsada por toques de dramatismo durante el largo metraje de más de dos horas.
Vemos como Owens mantiene dudas amorosas o cómo cuaja su amistad contra viento y marea con su entrenador Larry Snyder (Jason Sudeikis), una figura fraternal que ejerce de escudero, o su acercamiento a rivales como el corredor alemán Luz Long, con el que mantuvo contacto hasta la muerte de este último.
Tal y cómo filosofó el propio atleta: “Las amistades forjadas sobre la pista son el verdadero triunfo de la competición. Los premios se oxidan, los amigos no cogen polvo”.
Destacan el solvente elenco de secundarios que acompañan a Stephan James como Jeremy Irons o William Hurt, que ponen contexto a una época extremadamente convulsa y épica.
El héroe de Berlín fue rodada a caballo entre Canadá y el antiguo estadio Olímpico de Berlín en el que se ambientan las escenas de los Juegos para aportar “autenticidad vital”, en palabras del director.
El joven Stephan James fue escogido para encarnar a Owens en un multitudinario casting internacional. El actor canadiense realizó un intenso entrenamiento para emular al atleta y estar a la altura de la leyenda.
“Me concentré en los detalles, en su zancada, en la cara que ponía, para ser lo más fiel posible a esas cosas”, señala James en un clip exclusivo avanzado por RTVE.es [Ver entrevista arriba].
El intérprete afirma que sintió la responsabilidad sobre sus hombros al fundirse con la figura de un deportista adelantado a su tiempo al que se intenta hacer justicia en la gran pantalla.