González-Pons asegura que Nóos era "una ONG" según el convenio del proyecto de los Juegos Europeos
- Afirma que pensó que era una ONG cuando en 2005 firmó el convenio
- Según el exvicepresidente valenciano, Víctor Campos, ofrecían "absoluta solvencia"
- Tres altos funcionarios dicen que los 2 millones de gastos no estaban justificados
El exportavoz de la Generalitat Valenciana y eurodiputado del PP Esteban González Pons ha asegurado este jueves en su declaración como testigo en el juicio del caso Nóos que el instituto que presidía Iñaki Urdangarin era una "ONG". "En la primera línea del convenio se dice que es una entidad sin ánimo de lucro", ha incidido el eurodiputado al ser preguntado respecto al acuerdo para que dicho instituto promoviera la candidatura de los Juegos Europeos, un evento deportivo que entonces no existía y que nunca se celebró en Valencia.
González-Pons que ha declarado por videoconferencia ha asegurado que consideraba que Nóos era una ONG cuando en diciembre de 2005 firmó un convenio con esa entidad como presidente de la Sociedad Gestora para la Imagen Estratégica y Promocional de la Comunidad Valenciana.
La Sociedad Gestora para la Imagen Estratégica y Promocional que él presidía participaba en el acuerdo para estar "al lado de la ONG" para aportar su experiencia en materia de comunicación en el proyecto de Juegos Europeos, según ha explicado al tribunal.
En ese convenio, según ha asegurado, la sociedad pública que él presidía no se comprometía a realizar ninguna aportación económica en el marco de ese convenio, por que el que Nóos finalmente solo cobró 382.000 euros porque se le rechazaron facturas injustificadas por valor de casi 2 millones de euros.
Preguntado por la suspensión de pagos al Instituto Nóos por parte de la Generalitat Valenciana también considera que antes de que se dejara de pagar "no habían hecho nada grandes cosas" y que lo cree así porque él representaba a "una tercera parte en ese convenio" y nadie le puso "documentos" encima de la mesa.
"Una pareja difícil de igualar"
Además, ha afirmado que "si Iñaki Urdangarin y Diego Torres hubieran hecho su trabajo" como socios del Instituto Nóos, Valencia habría presentado su candidatura en el proyecto de los Juegos Europeos. Según dicho convenio, el gobierno valenciano aportaría hasta 6 millones de euros en dos años para que Nóos promoviera la candidatura.
Urdangarin y Torres, según González-Pons, formaban "una pareja difícil de igualar o de repetir" y el marido de la infanta Cristina era además de "un deportista olímpico, un dirigente del mundo del deporte y miembro de la familia real", por lo que considera que sin su presencia y sin la de Diego Torres, no hubiera podido plantearse el proyecto de los Juegos Europeos.
Por primera vez conoció la existencia del proyecto de los Juegos Europeos, según ha asegurado, cuando el expresidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, lo anunció en el debate del estado de la Comunidad Valenciana que se celebró en septiembre de 2005.
Urdangarin ofrecía "absoluta solvencia"
Antes ha declarado el exvicepresidente de la Generalitat Valenciana Víctor Campos quien ha asegurado ante el tribunal que Urdangarin, como miembro de la Casa Real y del Comité Olímpico Español y medallista, ofrecía "absoluta solvencia" para asumir el proyecto de Juegos Europeos.
"Nos ofrecían absoluta solvencia a la hora de tener la capacidad de impulsar el proyecto", ha dicho Campos sobre por qué la Generalitat suscribió un acuerdo con el Instituto Nóos, que lideraban Urdangarin y su socio Diego Torres, profesor de la escuela de negocios Esade, para esta iniciativa que consideraron "conveniente".
Campos ha admitido que antes del verano de 2005, viajó "en coche oficial" a Barcelona porque le había citado Urdangarin y para "hablar de distintas cuestiones que podían ser buenas para la Comunidad Valenciana" y que acudió porque "la persona" que invitaba "no es un cualquiera, no es un anónimo", y además representaba a una asociación sin ánimo de lucro.
"La persona que nos invita es miembro de la Casa Real y me pareció normal asistir", ha dicho Campos que ha admitido que acudió a la reunión de Barcelona porque la convocaba el duque de Palma. "El señor Urdangarin con toda las circunstancias que le acompañan", ha precisado. En esa reunión abordaron "distintas posibilidades y proyectos que podían ser interesantes para la comunidad valenciana".
El exvicepresidente valenciano ha defendido que la Generalitat buscó "la forma mas correcta, más pulcra y más clara" para formalizar el acuerdo con una asociación sin ánimo de lucro que consideraron "solvente a la hora de intentar poner en marcha este proyecto" y que si el instituto no hubiera sido una entidad sin ánimo de lucro no habrían podido firmar el convenio.
Tres altos funcionarios coinciden en que los 2 millones de gastos no estaban justificados
Tres altos funcionarios de la Generalitat Valenciana que conocieron las facturas presentadas por el Instituto Nóos por promover la candidatura de Juegos Europeos han coincidido en que los casi 2 millones de euros de gastos que se rechazaron no podían abonarse porque no estaban justificados.
Ante el tribunal de la Audiencia de Palma han comparecido como testigos quienes a finales de 2005 y en 2006 eran secretaria general administrativa de Presidencia, Ana Brusola; la interventora del mismo departamento, Irene Chova; y el abogado general de la Generalitat, José Marí.
Los tres han coincidido en que se rechazaron 123 facturas presentadas por la asociación de Iñaki Urdangarin y Diego Torres porque no se acompañaban de la preceptiva documentación que justificase el gasto, declaraciones que refuerzan el testimonio prestado este miércoles por la exsubsecretaria de presidencia Isabel Villalonga, que fue quien formalmente rechazó las facturas.
Brusola ha relatado que Villalonga le pidió ayuda después de que en la primavera de 2006, inmediatamente después de firmarse la adenda por la que se establecía un presupuesto anual de 3 millones de euros para el desarrollo del proyecto de Juegos Europeos, Nóos presentó numerosas facturas.
Los gastos "no venían con ningún informe documental"
El montante total de los gastos que la asociación de Urdangarin y Torres quería cargar a la Generalitat se aproximaba a los 2,4 millones de euros, de los que se pagaron casi 400.000 euros porque sí se justificaron debidamente, "una cantidad ínfima" respecto a la global, ha apuntado Brusola.
"No venían con ningún informe documental", ha recalcado la testigo, que ha asegurado que las deficiencias se comunicaron al contable de Nóos Marco Tejeiro y que eran subsanables, aunque la asociación nunca aportó las justificaciones que le hubieran permitido cobrar las facturas.
José Marí, exdirector del gabinete jurídico de la Generalitat, ha explicado que participó en una reunión donde se informó a los representantes de Nóos de qué gastos podían cargar a la subvención concedida y cómo tenían que justificarlos.
El superior político del antiguo jefe de la abogacía autonómica, el vicepresidente Víctor Campos le pidió que se interesara por el problema de las facturas de Nóos, él confirmó que el rechazo era correcto, se lo transmitió a Campos y éste le dijo que lo comunicaran a Nóos "con un poco de tacto", ha declarado el testigo.
Irene Chova, que cuando sucedieron los hechos era interventora de Presidencia de la Generalitat Valenciana, ha manifestado que el convenio de subvención por el que se encargó a Nóos la organización de los Juegos Europeos se ajustaba a la legalidad. Ha hecho hincapié en la falta de justificación que impedía pagar buena parte de las facturas.