'Rumbos' y 'El rey tuerto' compiten en Málaga en una jornada de cine dialogado
- Marc Crehuet adapta con humor una obra teatral de indignación
- La tragicomedia de Manuela Burló hila historias a través de la radio
Una obra original de la directora Manuela Burló Moreno sobre historias entrelazadas que se hilvanan a través de un programa de radio y una adaptación al cine de una obra de teatro son este domingo las apuestas que el Festival de Málaga propone para alzarse con la Biznaga en la 19 edición del certamen.
Son Rumbos y El rey tuerto, respectivamente, dos cintas que han defendido sus jóvenes directores. La murciana Manuela Burló Moreno, que recupera su nombre de actriz para presentar su segundo largometraje, y el catalán Marc Crehuet, escritor de la obra teatral del mismo nombre que empezó a representarse en una pequeña sala de Barcelona y después giró por toda España durante más de dos años.
De la indignación al humor
En El rey tuerto, la novia de David (Alain Hernández), un policía antidisturbios que ha reventado un ojo con una pelota de goma a un manifestante (Miki Esparbé), invita a cenar a una amiga de la infancia (Betsy Túnez y Ruth Llopis, respectivamente) sin sospechar que su novio es el antisistema herido.
Crehuet ha comentado que la primera versión teatral era "mucho más panfletaria" porque estaba escrita "desde la indignación", pero después rompió con su propio discurso "a través del humor y del choque de visiones del mundo", para mostrar que "hay un momento en el que es bueno entendernos".
Su idea previa, ha dicho, era presentar "a un personaje al que se le rompen los esquemas de tal manera que no tiene dónde agarrarse" como "un símbolo de lo que nos pasa en momentos de tanto cambio".
Para Miki Esparbé, rodar la película después de más de dos años de gira con la obra teatral fue "como hacer la última función y cerrar un círculo".
"Todos nos hemos dejado un pedacito de alma en este proyecto, que es el más especial de nuestras carreras, sobre todo por implicación", ha asegurado Esparbé, que ha introducido a su personaje un ligero ceceo que le hace aún más cómico en su patetismo, un rasgo, ha explicado a Efe, que aceptó Crehuet.
Una historia real, de noche y en coche
"Él quería que, desde pequeño, tuviera una incapacidad evidente, y le pusimos esa dificultad al hablar", ha comentado el actor.
Esparbé es también uno de los actores de las parejas de Rumbos, que Manuela Burló Moreno ha descrito como "una historia a tiempo real, de noche y en coche".
La directora ha bromeado con el pareado en una rueda de prensa celebrada en el teatro Cervantes de Málaga, después de que su película recibiera una salva de aplausos, amortiguados por los pañuelos que recogían alguna lágrima.
Porque la cinta de Burló es una tragicomedia que mezcla con unos diálogos muy fluidos y naturales momentos de absoluta carcajada con lo más hondo de los dramas que viven sus personajes, media docena de parejas, al final entremezcladas, que expresan "su amor, su desamor, sus miedos, y el rumbo que coge cada uno en la vida", ha dicho Burló.
Un recital de actores "en estado de gracia" que le hicieron olvidar a la directora su "miedo" a que la cinta resultara "claustrofóbica" por suceder todas las historias dentro de vehículos.
Aparte de la recuperación de Pilar López de Ayala en un registro cómico muy divertido en su desesperación, muy de agradecer a Burló, hay que destacar el "desencasillamiento" de Karra Elejalde, el taxista de la película, que llora el abandono y el desamor de la mujer de su vida, Nora Navas.
"Me apetecía apearme un poco de la comedia después de las dos últimas", ha explicado Elejalde.
También llora la "prostituta" Carmen Machi, aunque "que Lupe sea puta es lo de menos; la soledad y la ausencia de esta mujer se corresponde al ser humano, es una mujer sin llanto, seca", explica la actriz, que ha valorado sobre todo que la película se haga a base de diálogos.
Contar a través de las palabras
Por eso se enroló Machi con el equipo de Rumbos, ha dicho la actriz a Efe: "Porque flipé de la manera de contar a través de las palabras, en esta quietud, dos personas sentadas en un cubículo".
En su caso, un camión, donde el camionero Fernando Albizu le declara su amor; en un Ferrari rojo, nada menos, están Cristopher López y Emilio Palacios, que el año pasado enamoró Málaga con su actuación en Los héroes del mal.
"Si pudiera vivir del corto, lo haría", ha aseverado la directora, que también ha contado con otra "actriz", la voz en off de Julia Otero que conduce el programa nocturno que hila las historias.
"No hay cosa que más me vincule a la soledad que un programa de radio de madrugada", ha dicho. Y cierran el círculo Rafa Odorrika y Ernesto Alterio.