Mueren 13 personas al estrellarse un helicóptero en la costa de Noruega
- El aparato ha caído al océano y todos sus ocupantes han fallecido
- El helicóptero se dirigía a Bergen desde una plataforma petrolífera
- Noruega y Reino Unidfo prohiben los vuelos con helicópteros de ese modelo
Los trece ocupantes de un helicóptero que les trasladaba desde una plataforma petrolífera de la compañía Statoil al aeropuerto de Bergen, en Noruega, han fallecido este viernes al estrellarse el aparato en el oceáno, frente a la costa oeste del país nórdico, según han confirmado los servicios de rescate.
Pese a que en un primer momento se buscó a dos supervivientes, las labores de rescate se han suspendido unas horas después al constatarse la muerte de todos los ocupantes del helicóptero, la mayoría de nacionalidad noruega, aunque también había un italiano y un británico.
El helicóptero se estrelló a mediodía junto a la costa de la isla de Turøy, al oeste del país, por causas aún desconocidas, cuando iba en dirección al aeropuerto de Bergen, la segunda ciudad noruega por número de habitantes.
En el lugar del siniestro se ha visto una gran columna de humo, mientras que varios testigos, citados en los medios noruegos, han asegurado haber visto como el rotor del aparato salía despedido antes de que se produjera una explosión. Los servicios de rescate han encontrado el helicóptero a unos siete metros de profundidad en el mar, mientras que algunas piezas como el rotor fueron halladas en tierra.
Un modelo de helicóptero problemático
Según el centro de coordinación de rescates de Noruega, el helicóptero siniestrado había salido de una plataforma en el yacimiento Gullfaks B, propiedad de la petrolera Statoil, y se dirigía al aeropuerto de Bergen. Once de las víctimas del siniestro eran trabajadores de la compañía, mientras que los otros dos eran pilotos que trabajaban para CHC Helicopter. La plataforma petrolífera ha suspendido su producción de forma indefinida tras el accidente.
Statoil, asimismo, ha informado de que ha suspendido los vuelos de todos los modelos iguales a los del helicóptero siniestrado, un EC225 (Super Puma) de la firma Eurocopter, filial de Airbus. En cualquier caso, la autoridad de aviación civil de Noruega ha prohibido los vuelos de ese modelo, una medida que también ha adoptado su homóloga de Reino Unido.
Otros aparatos de ese modelo se han visto involucrados en varios accidentes los últimos años, y durante nueve meses recibieron una prohibición de vuelo, aunque la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA) les otorgó un permiso para volar de nuevo en julio de 2013. La EASA aprobó en abril del año siguiente una solución permanente para los EC225, que incluyó un nuevo diseño del eje central.
El área del oeste de Bergen tiene un gran tráfico de helicópteros que proporcionan servicio de transporte entre el continente y las plataformas de petróleo en el Mar del Norte.