La Fiscalía tailandesa acusa de asesinato al principal sospechoso de la muerte de un empresario español
- Este martes se ha cumplido el período máximo de prisión provisional
- El acusado, de 37 años, también español, es el principal sospechoso
- El asesinato del empresario español David Bernat se produjo en Bangkok
La fiscalía tailandesa ha presentado cargos formales contra el español Artur Segarra, detenido el pasado 7 de febrero en Camboya, por el asesinato del empresario de la misma nacionalidad David Bernat, al cumplirse este martes el período máximo de 84 días de prisión provisional.
Segarra, encarcelado en la prisión Thantasathan Piset desde el pasado 8 de febrero, también fue imputado por secuestro, robo y destrucción de pruebas, además de otros 9 delitos, según ha confirmado a Efe un fiscal del Tribunal Criminal de Rachada, en el norte de Bangkok.
El acusado, de 37 años, es el principal sospechoso y único detenido por el asesinato de Bernat, cuyo cuerpo apareció a fines de enero desmembrado a lo largo del río Chao Phraya, que cruza Bangkok.
Además de la acusación de asesinato, la fiscalía tailandesa ha formalizado los cargos de destrucción de pruebas, secuestro y robo contra el español Segarra, según fuentes oficiales.
El presunto asesino se enfrenta a otros 9 delitos, además de los ya mencionados y, de ser hallado culpable, podría ser sentenciado a la pena capital, confirmó a Efe un fiscal del Tribunal Criminal de Rachada, en el norte de Bangkok, encargado del caso.
No obstante, Tailandia lleva años sin ejecutar a los reos condenados a la pena capital, que conmuta por cadena perpetua. Está previsto que Segarra acuda a primera hora de la mañana del miércoles al tribunal para la lectura de los cargos.
La investigación sigue abierta
El acusado permanece desde el pasado 8 de febrero detenido de manera provisional en la prisión Thantasathan Piset, en el norte de Bangkok, mientras las autoridades prosiguen con las pesquisas.
Según las últimas comparecencias policiales, los equipos de investigación hallaron rastros de sangre de Bernat en una cañería del piso que Segarra tenía alquilado en capital tailandesa, donde se cree tuvo lugar el asesinato.
La Policía cuenta con numerosas imágenes donde se ven juntos a Segarra y Bernat, antes de la desaparición del segundo, así como capturas de vídeo del sospechoso comprando el material con el que supuestamente se realizó el crimen y retirando en varios cajeros el dinero sustraído a la víctima.
No obstante, los investigadores no han desvelado si han hallado el arma homicida o han localizado el lugar donde Segarra se deshizo de los restos mortales.
Suwat Chaengyodsuk, jefe de la investigación del caso, respondió con evasivas al ser consultado por Efe sobre los últimos avances de la investigación."Todos los papeles ya están en la fiscalía", señaló en tono cortante Suwat el pasado viernes.
Otro oficial consultado por Efe, que solicitó que no fuera publicado su nombre, explicó que la investigación continúa abierta a pesar de la imputación.
Durante una reciente visita al centro penitenciario, Segarra, un poco más delgado, pero con apariencia saludable, rehusó comentar a Efe los cargos de los que se le acusa así como su situación dentro de la prisión.
El empresario llegó a Tailandia acompañado por su presunto asesino
El presunto asesino, que negó ante la Policía su participación en el asesinato aunque admitió conocer a la víctima, tampoco ha cooperado con las autoridades para esclarecer el caso.
Bernat fue visto por última vez con vida el pasado 20 de enero, un día después de llegar a Tailandia procedente de Irán, en compañía del presunto asesino.
Díez días más tarde se encontraron las primeras partes del cadáver de Bernat, de unos 40 años y natural de la provincia catalana de Lérida, en el río Chao Phraya, que atraviesa Bangkok y donde luego fueron hallados otros trozos del cuerpo diseminados en el agua.
El equipo forense determinó que la víctima falleció por asfixia entre el 25 y el 27 de enero.
La policía tailandesa cree que el motivo del secuestro y extorsión de Bernat tuvo como objetivo lograr el acceso a sus cuentas bancarias en Singapur, de donde se transfirieron "grandes cantidades de dinero" a la cuenta de Segarra.