La brutal violación y asesinato de una mujer desata protestas en el sur de la India
- La víctima apareció con varias heridas de arma blanca y con los intestinos fuera
- El suceso ha recordado al caso de la mujer que fue violada en grupo en un bus
- Los manifestantes piden justicia mientras la policía todavía busca al sospechoso
La brutal violación y asesinato de una mujer en el estado sur de Kerala, en la India, ha desatado una ola de protestas. La víctima, que pertenecía a la casta más baja, fue encontrada el pasado 28 de abril con varias heridas de arma blanca y con los intestinos fuera. En los últimos días, se han sucedido las manifestaciones que piden justicia y demandan a las autoridades una investigación rápida.
El caso ha despertado en muchos los recuerdos de 2012, cuando una joven de 23 años murió tras sufrir una violación en grupo en un autobús. Tras el trágico incidente, las protestas se sucedieron en el país y se lograron cambios en la legislación.
La policía, que este miércoles ha tenido que enfrentarse a algunos de los participantes que han tirado piedras en las protestas, busca todavía al sospechoso. Según las primeras pistas, el atacante es un hombre de 30 años, estudiante de Derecho, al que se le vio salir de la casa de la mujer. Durante esta jornada, los agentes han difundido un retrato robot del presunto autor del crimen y han interrogado a siete personas, aunque no se ha producido ningún arresto.
"Algunos vecinos han comentado que oyeron ruidos y que vieron a un hombre salir de la vivienda de la mujer el día del asesinato. Parece que se conocían y estamos siguiendo los indicios que tenemos", ha explicado el comisario del distrito, Yatish Chandra.
Ante el carácter violento que han tomado algunas de las manifestaciones, el director general de la Policía, K. Padmakumar, ha asegurado que aunque entiende que la gente esté "muy enfadada", de momento tienen muy pocas pruebas para encontrar al acusado. "Lo estamos haciendo lo mejor que podemos", ha defendido.
La violencia contra las mujeres en la India
Los derechos de la mujer y la violencia contra ellas son temas que han estado en el punto de mira desde el incidente de 2012, y el ataque a esta última víctima ha resaltado la vulnerabilidad de las mujeres que pertenecen a las castas más bajas.
Tras las protestas por la violación colectiva a la joven universitaria en diciembre de 2012, India endureció sus leyes, pero la violencia de género, las violaciones, los ataques con ácido y el acoso continúan siendo comunes.
El año pasado, se aprobó una ley por la que se reducía a 16 años, la edad con la que alguien puede ser juzgado por violación y otros crímenes.
"Hasta un 35% o 40% de las familias en Kerala están encabezadas por mujeres. Incluso la madre de la víctima del ataque está criando dos hijas más en este espacio tan vulnerable y sin seguridad", ha declarado J Devika, del Centro de Estudios para el Desarrollo. "Es algo perturbador y también lo es el hecho de que a nadie le ha importado hasta que apareció en los titulares cinco días después", ha añadido.