El TC avala la militarización del espacio aéreo español durante la huelga de controladores de 2010

• Ratifica el fallo del Tribunal Supremo y rechaza el recurso presentado por USCA
• "La medida guarda proporcionalidad con los problemas que pretendía conjurar"

Una imagen del aeropuerto de Málaga tras al abandono de los controladores de sus puestos de trabajo (04/12/2010).

El Tribunal Constitucional (TC) ha ratificado el fallo en el que el Tribunal Supremo avaló la militarización del espacio aéreo español por el Gobierno durante la huelga de controladores de 2010 y ha rechazado el recurso de amparo presentado por la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA).

En la sentencia, a la que ha tenido acceso Efe, el pleno del TC coincide con el Supremo, que ya rechazó en mayo de 2014 las pretensiones de USCA dado que "la excepcionalidad de la medida guarda una razonable proporcionalidad con los importantes problemas que pretendía conjurar".

En concreto, los controladores recurrieron el decreto que encomendó el control del espacio aéreo español transitoriamente al Ministerio de Defensa y se lo arrebató a la empresa estatal Aena, pidiendo que se declarase nula esa norma.

Sin embargo, el Constitucional aclara ahora que si la Carta Magna y el ordenamiento "habilitan a determinados actos, decisiones o resoluciones parlamentarias" no hay razón legal para admitir dicho recurso. Un argumento que ya esgrimió la Sala de lo Contencioso Administrativo cuando explicó que la declaración del estado de alarma y su posterior prórroga fue dictada por el Gobierno en ejercicio de las facultades que le atribuye la Constitución.

Ahora el Constitucional tampoco considera "lesionado" el derecho a la tutela judicial efectiva de los controladores, al igual que sostienen tanto el Abogado del Estado como el propio Ministerio Fiscal, que en su escrito no ve "ninguna tacha de irrazonabilidad, arbitrariedad o error patente" en la decisión del alto tribunal.

Según defendía recientemente el sindicato, el origen del conflicto se sitúa en diciembre de 2010 cuando Aena se encontró con que los controladores habían agotado el cupo de horas previsto para todo el año, por lo que decidió que la "única salida" para cubrir el servicio hasta final de año pasaba por la "militarización".