Bruselas pide prohibir el baño en 58 playas y ríos españoles por la "mala calidad del agua" con respecto a 2015

• España es el tercer país de la UE con más zonas no aptas para el baño en 2015
• Sin embargo, la calidad del agua en España está por encima de la media europea
• España batió de nuevo récord de banderas azules, con 586 en playas

Bruselas pide prohibir el baño en 58 playas y ríos españoles por la "mala calidad del agua" con respecto a 2015

La Comisión Europea reclama prohibir el baño en 29 playas y 29 ríos españoles por la mala calidad del agua, de los considera que un total de 31 deberían cerrarse permanentemente por la mala calidad del agua en los últimos cinco años.

Así lo ha señalado tras publicar el informe sobre la calidad de la aguas en la UE de 2015, que señala que España es el tercer país de la UE con más zonas no aptas para el baño en 2015, sólo por detrás de Italia y Francia (95 cada uno).

En total, Bruselas desaconseja el baño en 383 zonas de toda Europa, que según este informe registran una calidad de agua "pobre" o no apta para el baño en 2015, de las que España acapara el 2,6 por ciento. Del total de ellas, considera que deben cerrar 34 (31 de las cuales están en España).

"Una prohibición permanente o un consejo permanente contra el baño debe establecerse en los lugares de aguas de baño clasificadas como pobres durante cinco años consecutivos", señala el Ejecutivo comunitario en su informe. Las otras tres zonas para las que Bruselas pide un cierre permanente se encuentran dos en Dinamarca y una en Suecia.

La mayoría de las playas y ríos en el informe de la CE, en Galicia

En el caso de España, se trata de las playas de A Coruña de la ría de Barranán, Regueiro, Peralto, Area da Vila, Camelle, A Concha, Barallobre, Caranza, A Cabana, Sardineiro, Playa Santa Cruz Porto, Ver, Centrona, Dada Delicias, así como la playa de Penaoural y los ríos Saa Pobra Do Brollón y Sil Ribas de Sil, en Lugo, el río Arzoa Vilardevos en Ourense y la playa de la Arealonga-Redondela de Pontevedra.

También los ríos en Castilla y León de Pelayo Arenas de San Pedro, la garganta del río Tiétar, el río Tormes Horcajada, el río Cantos Hornillo y el río Arlanzón, así como el río Alberche Escalona en Castilla-La Mancha, la playa de San Antonio en Vizcaya, el río Anduna Ochagavia en Navarra, el río Arba de Luesía de Aragón, la garganta Pedro Chate Jaraíz de la Vera en Extremadura, el río Aguascebas Villacarrillo en Andalucía y la playa Cala Pedrera en las islas Baleares.

En todo caso, el informe señala que el deterioro "más significativo" en la calidad de las aguas de baño en el último año se ha registrado en Francia, donde 29 zonas de baño han dejado de ser aptas para el baño en 2015 del total de 76 en toda Europa, cuando apenas un año antes cumplían al menos los requisitos de calidad mínimos.

Por el contrario, un total de 125 zonas de baño en el conjunto de Europa dejaron de ser no aptas para el baño al cumplir al menos los requisitos de calidad mínimos, entre ellas 20 en España, que se sitúa como el tercer país donde también se ha mejorado en más puntos la calidad de las aguas de baño, por detrás de Francia (32) e Italia (24).

La calidad del agua en España, por encima de la media europea

Sin embargo, este informe dice que el 87,1% de las playas en España controladas registró una calidad de agua excelente, por encima del 85,8% de la media europea y superior al 85,6% registrado en 2014.

El informe de la CE también refleja que el número de playas españolas con aguas no aptas para el baño ha caído desde 37 en 2014 a 29 en 2015.

Por lo que se refiere a la calidad de las aguas del interior en España, -esto es, en ríos y lagos- el 51,9% de las zonas controladas tenían una calidad excelente frente al 81% de media aunque también mejora la nota española de 2014 (49,6%).

Si se tiene en cuenta el conjunto de las zonas de baño, ya sean playas o aguas de interior, "el 96% de las aguas de baño europeas son de calidad aceptable y el 84% son excelente", según el comisario de Medio Ambiente, Karmenu Vella, que ha considerado que ello "es el resultado de 40 años invirtiendo en infraestructuras del agua y de las aguas residuales" y "un signo de que la legislación europea está funcionando bien" a la luz de las normas ambientales "elevadas" en Europa.