'Si Dios quiere', la comedia espiritual italiana

• Se estrena en España una de las comedias italianas más taquilleras de 2015
• RTVE.es entrevista a su director, Edoardo Falcone

Tráiler de 'Si Dios quiere'

Si Dios quiere, una de las películas italianas más taquilleras de 2015, aterriza en la cartelera española. Dirigida por el debutante Edoardo Falcone (hasta ahora guionista de múltiples comedias) es una comedia banda que se ríe un poquito de la religión y los creyentes, pero más de los que desprecian una dimensión trascendente. Una vuelta de tuerca que quiere convertir lo reaccionario en revolucionario y viceversa que se estrena el 28 de mayo en España.

Tommaso (Marco Giallini) es un cardiólogo ultraprofesional y frío en el trato personal- Cuando su hijo menor, que sigue sus pasos estudiando medicina, le anuncia inesperadamente su decisión de convertirse en cura, Tommaso centrará sus energías en desacreditar al cura sui generis (interpretado por Alessandro Gassmann) que parece la causa de la vocación de su hijo.

“El cirujano es una persona que quizá todos conocemos en un momento de nuestra vida. Un director de hospital arrogante, pagado de sí mismo, que transforma los pacientes en objetos”, explica Falcone en una entrevista para RTVE.es. “Para el cura me inspiré en uno que conocí hace años que hablaba de los evangelios en clave divertida, como en un espectáculo de cabaret”.

Toda comedia se ríe de algo y esta parece que dice que en el proceso de despojarse de lo espiritual y abrazar el ego, queda un vacío. “La película habla sobre eso: A falta de otra cosas, vamos perdiendo la gente que nos rodea y nosotros mismos”.

Para el director, el éxito de su película se basa en que “más allá de la diversión, los espectadores han sentido una verdad en la película al conocer a estos personajes”.

¿Crisis en la comedia italiana?

Falcone se confiesa admirador y deudor de la comedia italiana de los 50, 60 y 70, de Mario Monicelli, Dino Risi, Ettore Scola, o sea, de una de las grandes corrientes de la historia del cine. ¿Qué ha pasado para que la comedia italiana apenas viaje fuera de las fronteras italianas?

“En parte es una problema de distribución, pero es verdad que la comedia italiana ha pasado por una crisis, un estancamiento, pero en los últimos años ha comenzado un período interesante”, espera el cineasta.

Porque Falcone opina que el humor italiano (y sus particularidades) no se acaba nunca. “Los italianos nos reímos mucho de nosotros mismos, somos implacables. Digamos que hay un cierto cinismo de fondo y mucha ironía: forma parte de nosotros".

Aunque la película juega con la ambigüedad, parece la obra de un creyente. “No puedo contestar a eso porque tengo separada mi vida de mis películas. Es la película de una persona a la que le interesa ahora mismo este tema”.