El cambio climático es "uno de los riesgos más significativos para el Patrimonio Mundial", según la Unesco
- La Unesco examina su impacto en 31 sitios culturales y naturales de 29 países
- En la actualidad la Lista del Patrimonio Mundial en Peligro cuenta con 48 bienes
- El aumento del nivel del mar ya ha dañado cientos de edificios en Venecia
- La Isla de Pascua podría perder algunas estatuas debido a la erosión costera
El cambio climático "se está convirtiendo rápidamente en uno de los riesgos más significativos para el Patrimonio Mundial", advierte la Unesco en un informe divulgado en París, en el que examina su impacto en 31 sitios culturales y naturales de 29 países inscritos en la Lista del Patrimonio Mundial.
La Organización de la ONU para la Educación, la Ciencia y la Cultura destaca que fenómenos como el aumento de las temperaturas, el derretimiento de los glaciares, la subida del nivel del mar, fenómenos climáticos extremos o el mayor riesgo de sequías e incendios, afectan al Patrimonio de la Humanidad en todo el planeta, según el autor principal del documento, Adam Markham.
Bienes tan emblemáticos como Venecia, en Italia; el monumento megalítico de Stonehenge, en el Reino Unido; las Islas Galápagos, en Ecuador; la Región floral del Cabo, en Sudáfrica; la ciudad portuaria de Cartagena de Indias, en Colombia; o el Parque Nacional de Shiretoko, en Japón, figuran entre los estudiados.
De Iberoamérica, Coro y su puerto, en Venezuela; el Parque Nacional Huascarán, en Perú; el Bosque atlántico - Reservas del Sudeste, en Brasil; y el Parque Nacional de Rapa Nui, en Chile, son los otros sitios vulnerables incluidos en el informe Patrimonio mundial y turismo en un clima cambiante, elaborado por la Unesco en colaboración con el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y la Unión de Científicos Comprometidos (USC).
El estudio señala que los cimientos de los monumentos pueden verse desestabilizados por el aumento o decremento de la humedad del suelo, por cambios en el ciclo de congelación-fusión, o, en los sitios árticos, por el deshielo del permafrost, que es la capa del suelo permanentemente congelada. Además, el cambio del clima en el interior de los edificios, consecuencia de temperaturas y humedad más elevadas, puede provocar moho, podredumbre y plagas de insectos.
De hecho, el aumento del nivel del mar ya ha dañado cientos de edificios en Venecia y la Isla de Pascua podría perder algunas estatuas debido a la erosión costera, mientras que en muchos de los principales arrecifes de coral del mundo se observa "una decoloración sin precedentes relacionada con el cambio climático".
Otro de los sitios vulnerables estudiados por la Unesco es el de la ciudad de Hoi An, en Vietnam, cuya ubicación en la desembocadura del río Thu Bon hace que sea propensa a sufrir inundaciones durante la temporada de lluvias. Aunque como la mayor parte de su centro histórico está a no más de dos metros sobre el nivel del mar también es vulnerable al aumento del nivel del mar y a la erosión de la costa. El distrito de An Dinh, que concentra la práctica totalidad de los edificios históricos, podría sufrir inundaciones anuales a partir de 2020.
La Lista del Patrimonio Mundial en Peligro cuenta con 48 bienes
De ahí que los autores del informe recomienden al Comité del Patrimonio Mundial de la Unesco que cuando examine futuras candidaturas a esa lista de lugares de "valor universal excepcional", tenga en cuenta entre otros criterios si estos corren riesgo de degradación debido al cambio climático.
En este sentido, añaden, los efectos nefastos del calentamiento global podrían incluso hacer que pierdan su condición y sean expulsados algunos bienes de esa prestigiosa lista, integrada en la actualidad por 1.031 sitios de 163 países, de ellos 802 culturales, 197 naturales y 32 mixtos, muchos importantes destinos turísticos. De momento, la Lista del Patrimonio Mundial en Peligro cuenta con 48 bienes.
La directora del Centro del Patrimonio Mundial, Mechtild Rössler, ha estimado que es de "vital importancia" limitar el aumento global de la temperatura", tal y como se fijó en el Acuerdo de París adoptado el pasado diciembre en la cumbre del clima COP21. Se trata de "entender, vigilar y abordar mejor" esta amenaza en los sitios del Patrimonio Mundial de todo el mundo, en beneficio de las generaciones actuales y futuras, ha añadido.