Puigdemont pide acordar la consulta independentista con el Gobierno que salga del 26J
- Reafirma que sólo queda un año para las elecciones 'constituyentes' en Cataluña
- Sólo aprecia"coraje" en Podemos, pero es consciente de que no tendrá mayoría
- Quiere esperar al nuevo gobierno, pero advierte: la paciencia "no es infinita"
El presidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, ha reafirmado este viernes en Madrid su compromiso con la hoja de ruta trazada por el Parlamento catalán para poner en marcha el proceso de desconexión con el Estado español así como los plazos previstos para ello y ha exigido "coraje" al gobierno que salga de las elecciones del 26 de junio para buscar una solución "acordada" al conflicto catalán.
Por lo tanto, apelando a la cultura de pactos, "el pactismo", que a su juicio se da en Cataluña más que en la política nacional española, ha pedido dialogar tras el 26J con el fin de acordar la fecha, la pregunta y el quorum de una consulta independentista.
Puigdemont ha tenido una agenda cargada en Madrid, que le ha llevado, primero, a protagonizar un desayuno informativo, y después, a inaugurar un nuevo foro de conferencias de la Fundación José Ortega y Gasset-Gregorio Marañón, que preside el exministro Eduardo Serra. Al evento han asistido la exdiputada socialista Carme Chacón y la exparlamentaria del PP Cayetana Álvarez de Toledo.
El ciclo lleva por título "Escolta España-Escucha Cataluña", y tal como se ha explicado, pretende abrir un canal de diálogo entre ambas administraciones que permita encontrar soluciones al desacuerdo existente en la actualidad, justo el eje de los discursos del president durante el día de hoy.
Puigdemont ha reprochado al Estado español su "despreocupación" respecto a las demandas catalanas, y ha dejado claro que éstas no se van a desvanecer por el mero hecho de no ser atendidas. En este contexto, ha solicitado que "no pase de este año" que el independentismo sea reconocido como un actor político, al mismo nivel que el unionismo.
No ve "un perfil con coraje suficiente"
Asimismo, para el presidente de la Generalitat catalana, al tiempo que los catalanes ven "el diálogo" como "su casa", "su nación", en la política del Estado español prevalecen las dificultades para "ceder" o "entender las razones del otro".
Ha destacado que no ve "un perfil con coraje suficiente" entre los líderes de los principales partidos, y si bien ha subrayado "la convicción real" y no "táctica" respecto al referéndum del secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, ha concluido: "Todos sabemos, y él también, que no va a haber una mayoría política que lo permita".
Sobre la actitud del Gobierno de Mariano Rajoy, además, se ha mostrado muy crítico, no porque no haga nada sino porque "avanza en la senda contraria y es capaz de protagonizar episodios" tan "grotescos" como el de tratar de impedir que la gente anime a su equipo con su bandera, en alusión a la reciente final de Copa del Rey, cuando la Delegación de Gobierno prohibió inicialmente entrar en el Vicente Calderón con la 'estelada', la enseña del independentismo.
Pese a todo, el president ha proclamado la necesidad de tejer nuevas relaciones entre el Estado español y Cataluña, pero siempre y cuando haya "coraje" para ello, pues no es tanto el "desentendimiento" lo que se persigue, sino el "reentendimiento". "Pactar no es un acto de cobardía, sino que engrandece", ha apostillado.
Puigdemont pide al Estado que "deje de pensar que esto es un asunto pasajero de políticos enloquecidos y ciudadanos engañados" y ha avisado al Gobierno de que "no puede transitar de despreocupación en despreocupación hasta la preocupación final" porque los dos millones de personas que han apoyado a partidos independentistas "no se van a ir a su casa".
Negociar con el Gobierno que salga del 26J
Así, ha invitado al Gobierno que salga de las elecciones del 26 de junio a sentarse a negociar una consulta sobre la independencia de Cataluña sin ideas preconcebidas, hasta el punto de abrirse a pactar la fecha, la pregunta y el quorum.
En varias ocasiones el político de CDC ha reiterado que ellos no están "en la vía de la unilateralidad" y que apuestan por pactar la fecha y la pregunta para un referéndum, incluso el 'quorum' que había que fijar para analizar sus resultados o cuándo se podría volver a preguntar los catalanes.
No obstante, también ha avisado de que, si bien no quería hablar de "última oportunidad" para el acuerdo, "la paciencia" de los catalanes "no es infinita".
Ahora bien, Puigdemont ha dejado claro que la Generalitat continuará con su hoja de ruta, que incluye la creación de estructuras propias de un Estado hasta la celebración de elecciones constituyentes dentro de un año, es decir, que aprobarán "las leyes que den amparo legal a la acción del gobierno".
El calendario hacia la independencia, sus ritmos y plazos siguen adelante, hasta el punto de que si se logra completar la hoja de ruta, Puigdemont ha reconocido que no será candidato; otra cosa es que el proceso se corte "abruptamente", posibilidad remota, a su entender, pero que "moralmente" sí le conduciría a ser el candidato.
Una militante de VOX entrega a Puigdemont unas esposas y un Código Penal
La primera de las conferencias de Puigdemont de la mañana, en un hotel madrileño, fue interrupida por una espontánea que se ha declarado militante de VOX al grito de "¡Sin ley no hay democracia!", que se acercó hasta él presidente catalán para entregarle un ejemplar del Código Penal y unas esposas, a modo de denuncia por el incumplimiento de la ley, en el que a su juicio, incumple el Ejecutivo catalán.
Acto seguido, ha abandonado la sala y se ha unido a un grupo de afiliados de ese mismo partido con camisetas en defensa de la unidad de España.