Brian Wilson convierte el Primavera Sound en una fiesta colorista de los años 60

• Han sonado temas como "Surfin' USA", "I'll get around", "Surfer girl" o "Good vibrations"
• El festival cierra este sábado Wilson y otros artistas como Manel o The Chills

Brian Wilson convierte el Primavera Sound en una fiesta colorista de los años 60

El líder de The Beach Boys, Brian Wilson, ha transformado este sábado el escenario más grande del XIV festival Primavera Sound en una fiesta colorista de los años 60 repleta de sonidos surferos y rock con himnos como "Surfin' USA", "I'll get around", "Surfer girl", "Fun, fun, fun" y "Good vibrations".

En el concierto de coleccionista, que ha empezado con una aplaudida "Wouldn't it be nice", un mayor Wilson ha desgranado todas las canciones del álbum Pet Sounds, compuesto casi en su totalidad por él cuando se cumplen 50 años de uno de sus trabajos más influyentes y que incluye temas destacados como "God only knows".

Los temas históricos del grupo han aflorado y tomado sentido al lado del mar barcelonés en uno de los conciertos más esperados del festival, en que el veterano compositor se ha mostrado hierático delante de un piano, pero muy hablador y empático con el público al que ha dirigido varias palabras en castellano.

Six Organs of Admittance, Wild Nothing, Manel, The Chills y Los Chichos

Antes, en las primeras horas de la tarde, el directo de Six Organs of Admittance, que ha tenido lugar en el Auditori, podría resumirse con un solo calificativo: la intensidad tanto sonora como emocional que ha derrochado Ben Chasny, con un concierto que forma parte del show comisariado por David Tibet & Current 93 que incluye la participación de Angel Witch, Baby Dee y Current 93, y que muestra su faceta más oscura, repleta de capas hipnóticas y desafiantes con la única compañía de su guitarra eléctrica.

Por otro lado, los destellos de dream pop y shoegaze han combinado a la perfección con las melodías dulces y pegadizas en la propuesta que Wild Nothing han presentado este jueves en el escenario Heineken, donde han desgranado las canciones que componen Life of pause, publicado este año y que supone el tercer trabajo discográfico hasta la fecha de la banda estadounidense.

Más tarde, los catalanes Manel han estrenado su nuevo Jo Competeixo, debutando en uno de los dos escenarios de gran dimensión, en un concierto con considerable afluencia, sobre todo de público local que aún no dominaba con suficiente soltura los temas, pero sí hits anteriores como "Benvolgut" y "Teresa Rampell", que han puesto a bailar a la pista sellando el primer concierto de una larga gira.

Más allá, la banda neozelandesa The Chills ha puesto de manifiesto en el escenario Ray-Ban que han recuperado la forma y que vuelve a ser referente de un pop brillante, fluido y atmosférico, tal y como han demostado con su quinto disco, 'Silver bullets', que ha presentado por todo lo alto con sabiduría, experiencia y energía renovada, más de 20 años después de su anterior trabajo.

Con la noche ya entrada, Los Chichos se les ha quedado realmente pequeño el escenario gracias a un público 'chichero' rebosante, animado y predispuesto a bailar clásicos de la banda como "Son ilusiones", "Amor de compra y venta" y "Mujer cruel", y que ha estallado con "Quiero ser libre".