El atacante de Orlando actuó solo, negoció con la policía y dijo que tenía explosivos durante el asalto

• La policía revela nuevos detalles sobre el atentado en Orlando
• Dice que entró ante el peligro "inminente" de nuevas muertes
• El FBI le investigó durante 10 meses y cerró su expediente sin conclusiones
• Toda la información en el Especial Atentado en Orlando

Agentes de seguridad mantienen acordonado el escenario de la masacre en Orlando.

El peligro "inminente" de nuevas muertes llevó a la Policía a entrar en la discoteca gay Pulse, donde este fin de semana se produjo la peor matanza de Estados Unidos con arma de fuego, con 49 víctimas más el sospechoso, Omar Mateen. Las autoridades han revelado nuevos detalles del "día más horrible" en la historia de la ciudad, según el alcalde de Orlando.

"Creíamos que eran inminentes más pérdidas de vidas y por eso tomé la decisión de iniciar la operación de rescate", ha afirmado el jefe del Departamento de Policía de Orlando, John Mina, en rueda de prensa.

Atrincherado en uno de los baños

El agente ha señalado que sus negociadores hablaron con Mateen y que mientras mantuvieron estas conversaciones parecía "tranquilo" y no se produjeron disparos, pero que en un momento dado el sospechoso habló de que tenía "explosivos".

Durante estas conversaciones telefónicas, ha explicado el agente, el sospechoso juró lealtad al autodenominado Estado Islámico (EI) y trató de negociar.

Sin querer revelar todos los detalles debido a que la investigación sigue abierta, Mina ha indicado que gracias a las conversaciones telefónicas pudieron saber que Mateen se refugió en uno de los baños de la discoteca, donde tenía a cuatro o cinco rehenes, mientras mantenía entre 15 y 20 en otro. Mientras estaba en el baño, la Policía pudo rescatar a varias personas que estaban retenidas, ha indicado.

El FBI investiga si hay vinculación real entre Omar Mateen y el Estado Islámico

Un único asesino

La Policía ha desmentido en las redes sociales los "infundados" rumores de que hubiese más de un sospechoso en el local y ha asegurado que el único asesino, Omar Mateen, "está muerto".

Sin embargo, las autoridades desconocen todavía qué llevó a Seddique Mateen, de origen afgano, a este centro de ocio nocturno de Orlando, situado a unos 200 kilómetros al norte de su casa, en Fort Pierce.

Su padre, Mir Seddique Mateen, descartó este domingo al canal NBC News que su hijo tuviera un móvil religioso y apuntó a un acto homófobo al recordar que Omar se puso furioso hace dos meses cuando, durante una visita a Miami, vio a dos hombres besándose en la calle delante de su hijo de tres años.

Dos viajes de peregrinación a La Meca

Las autoridades saudíes han confirmado, sin embargo, que tienen el registro de dos viajes de peregrinación de Omar Mateen a La Meca en 2011 y 2012, algo que dejaría en entredicho las declaraciones del padre de que no era muy religioso.

El Estado Islámico ha reivindicado este lunes de nuevo la matanza y ha calificado a Omar Mateen, como un "soldado del califato".

La matanza se produjo en la madrugada del sábado cuando el sospechoso comenzó a disparar en la discoteca y tomó un grupo de rehenes en su interior. Tres horas más tarde, agentes de los equipos especiales entraron en el local, liberaron a 30 personas y mataron al sospechoso, de 29 años y nacido en Nueva York.

El alcalde de la ciudad, Buddy Dyer, ha informado de que ya se conoce la identidad de 48 de las 49 víctimas mortales, y que ya han sido informadas 24 familias.

Identificadas 48 de las 49 víctimas mortales de la matanza de Orlando

Un tercer arma

Durante la conferencia de prensa también se ha informado de que se encontró una tercera arma en el auto del sospechoso y que la investigación de todas ellas llevan a Mateen.

La Fiscalía General ha señalado que la investigación está en su fase inicial y que esta apunta a que no hay más personas que supongan un riesgo público, aunque sí están investigando a varias por su posible conexión con el autor de la matanza.

Por su parte, el gobernador de Florida, Rick Scott, ha informado de que ha pedido al presidente de EE.UU., Barack Obama, que declare el estado de "desastre" en Florida debido a esta matanza.

El FBI lo investigó 10 meses y aún así pudo comprar un arma

Omar Mateen fue vigilado durante 10 meses por radicalismo y entrevistado en una investigación posterior, pero no se encontraron motivos para mantener las indagaciones o prohibirle la compra de armas, ha informado este lunes el director del FBI, James Comey.

Comey ha afirmado en un encuentro con periodistas en Washington que, "con la información disponible ahora, no creo que debamos cambiar el modo en que hacemos las cosas". La investigación fue cerrada por falta de indicios suficientes de peligro terrorista.

El jefe del FBI ha reconocido que el sistema de comprobación de antecedentes del FBI para la compra de armas no limita a alguien con una investigación ya cerrada por radicalismo.

"El sistema está organizado de modo que, si una investigación está cerrada, no se presentan notificaciones cuando se compra un arma (y se realiza una confirmación de antecedentes)", añadió el jefe del Buró Federal de Investigación (FBI).

Mateen, un estadounidense de origen afgano que compró sus armas legalmente a principios de mes, fue investigado y vigilado a fondo entre mayo de 2013 y marzo de 2014 por el FBI, después de hacer comentarios en su puesto de trabajo sobre vínculos con Al Qaeda y la milicia chiíta libanesa Hizbulá, grupos contrapuestos.