Iglesias: "Si soy presidente querré aplicar un programa de corte socialdemócrata, como Allende"

• Reniega del comunismo que promulgaba hace tiempo porque "nos hacemos mayores"
• Insiste en la necesidad de pactar con Sánchez y en que no tiene líneas rojas
• De quedar por delante del PSOE, rechaza la idea de "dar un paso al lado" para investir a Sánchez
• Si PSOE vuelve a pactar con C's, lo volverán a someter a las bases
• Todo lo ha dicho en una entrevista para La Sexta

El líder de Podemos, Pablo Iglesia, el pasado 11 de mayo en un acto del partido en El Pozo, Madrid.

El secretario general de Podemos y candidato de Unidos Podemos a la Presidencia del Gobierno, Pablo Iglesias, ha asegurado este domingo que si es el próximo presidente del Ejecutivo aplicará un gobierno "de corte socialdemócrata", "como (Salvador) Allende o como (José) Mújica".

Lo ha dicho en una entrevista en laSexta, recogida por Servimedia, donde ha reconocido que fue un "joven comunista", visión que ha cambiado ahora, que aspira a la Presidencia del Gobierno. En este sentido, preguntado sobre si es comunista, sostuvo que "nos hacemos mayores" y que cuando uno es candidato "tiene que decir las cosas que puede hacer". "Me siento orgulloso de haber sido un joven comunista", indicó.

A la pregunta de si es socialdemócrata contestó que uno es lo que hace. "Uno puede decir ser en su casa que es muchas cosas. Yo ahora soy candidato a la Presidencia del Gobierno", ha apuntado. "Soy socialista como Allende, socialista como Mújica", ha insistido al remarcar que en el siglo XXI y como aspirante al Gobierno no puede permitirse decir "ciertas cosas" como cuando era 'enfant terrible' de la política.

"La socialdemocracia es una opción de gobernabilidad que no tiene tanto que ver con las etiquetas ideológicas de cada uno, sino con opciones de gobierno en Europa".

Ha dicho que el hecho de que las constituciones europeas democráticas recojan principios de la socialdemocracia "habla de unos éxitos que empezaron a terminar cuando el neoliberalismo entró como un virus en el corazón de muchos partidos socialdemócratas y se expresó en desgracias, como la tercera vía de Tony Blair", dijo el dirigente morado, para afirmar después que le gustaría ser un presidente "que aplique un programa económico y político de corte socialdemócrata", que considera "es lo sensato y aplicable en un momento como este".

Reconstruir el espacio socialista abandonado por el PSOE

"Lo que ocurrió en España es que por desgracia el Partido Socialista dejó de ser socialista en muchas cosas" y "la reconstrucción de ese espacio nos compete a muchos, no solamente a nosotros, sino también al Partido Socialista y ojalá podamos reconstruirlo juntos", ha manifestado.

Además, ha considerado, haciéndose eco de las últimas encuestas, que Unidos Podemos puede ganar las elecciones. "Nuestro adversario no es el PSOE, es el PP", continuó para decir después que no cree que el PP "cuestionara" que esta confluencia ha ganado las elecciones si quedan por delante de ellos en votos pero no en escaños.

Ha dicho también que si el PSOE vuelve a proponer un gobierno con Ciudadanos lo someterá a las bases de Podemos e insistió en que después del día 26 de junio planteará un gobierno de coalición progresista al PSOE. "Es bueno que miremos al futuro", dijo.

Ha negado que se haya planteado realizar junto a Pedro Sánchez una presidencia "por turnos", ya dijo no ver esa posibilidad si hay una diferencia "clara" de votos entre el PSOE y Unidos Podemos en estas elecciones.

"Lo sensato sería un gobierno de coalición. Quiero pactar con Pedro Sánchez porque es necesario para mí país", ha continuado, para decir después que si Sánchez fuera "más tajante" en su posición en contra de que los expresidentes de gobierno pertenezcan a Consejos de Administración de empresas privadas el acuerdo sería "más fácil".

Después de que esta semana asegurara que el expresidente del gobierno José Luis Rodríguez Zapatero es el mejor de la democracia, ha dicho sobre la figura del socialista que le tiene "muchísima admiración y respeto".

"Zapatero hizo cosas muy buenas para España. Encaró la crisis, cometió errores", pero "uno puede admirar a quien no piense igual que uno".

Ha reconocido que consulta con Zapatero cuestiones de política europea e internacional, porque él dispone la experiencia de gobierno. "Le considero alguien muy cercano. Se puede tener una relación de amistad con quien piensa diferente", ha zanjado.

No explicará a la Asamblea Nacional de Venezuela la financiación de Podemos

Iglesias ha avanzado que no atenderá la petición de la Asamblea Nacional de Venezuela para que explique allí el supuesto pago de unos 7 millones de euros por parte del Gobierno venezolano por asesorías de la Fundación CEPS, en la que participaron miembros de su partido.

Ha recordado al parlamento venezolano que la financiación ilegal de los partidos la investigan en España los tribunales españoles y que hasta cinco veces el Tribunal Supremo ha dicho que "no había nada y ha archivado los casos", si bien ha asegurado que no tiene problemas en dar explicaciones.

"Ningún problema, pero una cosa es que a uno le acusen de un delito, que eso hay que ir a los tribunales, y otra que te inviten a dar unas charlas", ha añadido el candidato de Podemos a la Presidencia del Gobierno.

Y ha recalcado: "Si alguien nos quiere acusar de un delito no se nos cita en el Parlamento de otro país. Esos señores pueden perfectamente viajar a España, que lo han hecho muchas veces, y pueden presentar una denuncia aquí. Pueden sustituir a Manos Limpias y como ya están todos en la cárcel, a lo mejor ahora les sustituyen, presentan la sexta denuncia y que el Tribunal Supremo conteste".

En ese contexto, Iglesias ha sentenciado que "en política no todo vale" y ha instado a quien acuse a Podemos de financiación ilegal a ir a los tribunales y "no montar juegos mediáticos en asambleas legislativas que tienen que estar para otras cosas".

Sobre la situación en Venezuela, ha lamentado la grave crisis institucional de enfrentamiento entre el Legislativo y el Ejecutivo, ha elogiado las labores de mediación, como la del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, y ha abogado por el diálogo.

Preguntado sobre si piensa, como el líder de IU, Alberto Garzón, que el opositor venezolano Leopoldo López es un "golpista", se ha limitado a afirmar que lo desconoce, pero también ha considerado que Venezuela es un país en el que se han producido muchos golpes de Estado