El Senado de Francia aprueba la reforma laboral mientras el país vive una nueva jornada de protestas

• Es una versión más liberal gracias a la mayoría de la derecha en la Cámara alta
• Miles de manifestantes recorren las calles de las principales ciudades galas
• Los sindicatos presentan el resultado de la consulta ciudadana sobre la reforma

Manifestación contra la reforma laboral en Lyon.

El Senado de Francia ha aprobado el proyecto de ley de reforma laboral con 185 votos a favor y 156 en contra, en una más liberal gracias a la mayoría de la derecha en la Cámara Alta. El texto deberá volver ahora a la Asamblea Nacional, con mayoría de izquierdas, que previsiblemente volverá a retocarla para dejarla en su estado original, antes de someterla a una incierta votación.

El Ejecutivo del primer ministro francés, el socialista Manuel Valls, ya ha advertido de que recurrirá de nuevo, si lo ve necesario, al artículo 49.3 de la Constitución para sacar adelante la ley evitando que los diputados la voten, ante las dificultades para alcanzar una mayoría de apoyos.

Los sindicatos, encabezados por la CGT, centran sus críticas en el segundo artículo del texto, que establece la supremacía de los acuerdos laborales dentro de cada empresa sobre los convenios sectoriales.

En el Senado, el proyecto de la llamada Ley El Khomri -en alusión a la ministra de Trabajo, Myriam el Khomri- ha contado con el respaldo del partido Los Republicanos, liderado por el expresidente Nicolas Sarkozy, y el rechazo de socialistas, comunistas y ecologistas.

Continúan las protestas contra la ley

La votación ha tenido luegar mientras miles de personas -14.000 según la policía y 55.000 según los sindicatos- se manifestaban en la parisina plaza de la Bastilla contra esta ley. La manifestación se ha desarrollado bajo unas estrictas medidas de seguridad, con unos 2.500 agentes desplegados en las calles parisinas y la detención de 38 personas (81 en toda Francia) que pretendían entrar en las marchas supuestamente para crear altercados.

La movilización ha tenido su reflejo en la huelga convocada por los controladores aéreos, que ha provocado el retraso de algunos vuelos o incluso algunas anulaciones de última hora, si bien estas han sido "por parte de aerolíneas de bajo coste y no solicitadas" por la Dirección General de la Aviación Civil, ha explicado a Efe una fuente de este organismo. Los trayectos más afectados han sido los de media y corta distancia.

También ha habido protestas en Marsella, donde millares de personas -según los sindicatos- han desfilado desde el puerto viejo por el centro histórico. Uno de los participantes, Bernard Cresta, un trabajador social que ha participado en ocho de las once manifestaciones celebradas hasta el momento cree que "cada vez más gente muestra su oposición a la nueva ley".

Esta mañana, los sindicatos han remitido al Elíseo los resultados de la consulta ciudadana sobre la reforma laboral. Con una participación de 700.000 votantes, el 92% opta por la retirada del texto y el 8% por su mantenimiento, según la intersindical que reúne a las centrales más representativas. Los sindicatos esperan que el presidente galo, François Hollande, flexibilice su postura tras la consulta.