'Infierno azul', el miedo a los tiburones no pasa de moda

• El filme, con Blake Lively, muestra el duelo entre una surfista y un tiburón
• La película, dirigida por Jaume Collet-Serra, se estrena el 15 de julio

Tráiler de 'Infierno azul'

Una surfista, un tiburón y un islote. Con tan solo tres elementos y un guión austero el director español Jaume Collet-Serra (Sin identidad) ha armado Infierno azul, su último filme.

Un thriller que recurre al enfrentamiento atávico entre el humano y el gran tiburón blanco. Un duelo donde solo puede quedar uno, y que ya casi compone un subgénero del cine en si mismo. La película llega a las pantallas el 15 de julio.

La cinta narra la odisea de Nancy (Blake Lively) una resuelta estudiante de medicina de Texas, que llega a una playa perdida de México para aclarar sus ideas tras la muerte de su madre.

La historia se focaliza esencialmente en el ingenio y los recursos de supervivencia

En este paraje de ensueño se quedará atrapada mientras surfea, a tan solo 200 metros de la orilla, al entrar en la zona de caza de un fiero tiburón que le asediará sin descanso.

El filme sigue con dignidad la estela del mítico Tiburón de Spielberg, con todos sus tópicos y algún toque kitsch. Infierno azul más que aterrorizar mantiene al espectador en vilo durante todo el metraje, en el que el entretenimiento no decae, por lo que no se puede pedir más a una película estrenada en pleno verano.

Una historia de supervivencia

La historia se focaliza esencialmente en el ingenio y los recursos de supervivencia que debe desplegar el personaje de Lively, con una actuación solvente como heroína acuática por la que atraviesan todos los planos del filme.

En ningún momento, se demoniza al animal marino al que apenas se atisba en la primera parte de la película, en un recurso para subir la tensión con planos contrapicados e inquietantes sombras de su figura y de la aleta. Todo un clásico. Más bien se presenta al escualo como una criatura castigada por la mano del hombre.

“Quería desvelarlo poco a poco, y que luego fuera como una fuerza de la naturaleza. Mi razonamiento es que si Nancy no consigue ver bien al tiburón, entonces los espectadores tampoco deberían poder verlo bien”, señala Jaume Collet-Serra en las notas de producción.

El realizador español, afincado en Los Ángeles, suma con esta cinta un título más en su filmografía en Hollywood.

El filme fue rodado en la pequeña isla australiana de Lord Howe noticias

La fotografía de Infierno azul es espectacular. El filme fue rodado en la pequeña isla australiana de Lord Howe, uno de los pocos parajes vírgenes que quedan en el planeta. Las imágenes del océano y los paisajes son maravillosos, apuntalados por una banda sonora acertada.

La protagonista, Blake Lively (El secreto de Adaline, Gossip girl), tuvo que enfrentarse al consabido duro entrenamiento para encarnar a la surfista atacada, en una historia en la que el tiburón simboliza la metáfora de cómo el ser humano encara sus miedos y consigue superarlos.

“Esta película te atrapa a un nivel muy primario”, ha afirmado Lively, “Trata sobre la fuerza para sobrevivir, la fuerza de voluntad. Cuando leí el guion, pensé: ‘¿Qué haría yo en esa situación?’, Nancy lucha por sobrevivir de una forma verdaderamente increíble”, añade.

El español Óscar Jaenada completa el reparto como Carlos, un lugareño que sirve de guía a Nancy para llegar a la playa. “Es quien conoce el camino para llegar a ese lugar, es una playa muy bien escondida y resulta bastante difícil de encontrar”, explica Jaenada. “Más tarde, se da cuenta de que está pasando algo en esa playa y decide ir a ver”.

Esto es lo que nos ofrece Infierno azul. Una película de serie B en la que las sorpresas, la tensión y el mensaje sobre el afán de superación están incluidos.