Las activistas de Femen defienden su "pacifismo" en su primer juicio
- Están acusadas de resistencia a la autoridad y desorden público
- Fueron golpeadas y rociadas con espray, según ha declarado la líder de Femen
- Es el primer juicio a activistas de esta organización en España
La líder del movimiento feminista Femen, Laura Alcázar, ha declarado este martes en el juicio por irrumpir semidesnuda en una marcha "provida" el 17 de noviembre de 2013 en Madrid que los manifestantes 'provida' las golpearon con paraguas, las zarandearon y las rociaron con espray.
Así lo ha señalado en la vista oral que se ha celebrado en el Juzgado de lo Penal número 19 de Madrid por la causa abierta a Alcázar y a otras cuatro activistas de Femen, detenidas en 2013 por exhibicionismo en una manifestación antiabortista en la que proclamaron mensajes favorables al aborto con sus torsos desnudos.
"En ningún momento agredíamos ni a las personas allí presentes ni a la Policía. Queríamos protegernos a nosotras mismas porque fuimos atacadas", ha explicado Alcázar al juez.
El Ministerio Fiscal las acusa de los delitos de desórdenes públicos y resistencia a la autoridad, y solicita una pena de nueve meses de prisión para cada una de ellas, con una multa de 1.800 euros.
La Asociación Enraizados en Cristo y en la Sociedad, que ejerce de acusación particular, va más allá y añade los delitos de exhibicionismo y contra el ejercicio de los derechos fundamentales, por los que piden hasta 6 años y medio de cárcel para cada una.
"No hacemos uso de la violencia"
La líder de Femen, que sólo ha respondido a las preguntas de su letrado, ha destacado que su intención "era llevar a cabo una acción pacifica no violenta para visibilizar el problema que había en ese momento, que era el debate de la despenalización de la Ley del aborto".
Para ello, se situaron a "una cierta distancia" de la cabecera de la manifestación con el fin de tomar una "fotografía" de los distintos grupos que participaron en la marcha "sin ninguna intención de perturbar ni de interrumpir nada", según ha declarado Alcázar.
"Nuestras protestas siempre son absolutamente pacíficas y no hacemos uso de la violencia porque nos definimos como un movimiento pacífico", ha destacado la líder del grupo feminista.
Fue en el momento en que pusieron el pie en la calle cuando varias personas se abalanzaron sobre ellas. "Nos zarandearon, nos dieron con paraguas y nos rociaron con botes de pintura roja", ha añadido la procesada, que ha definido la escena como "un caos" y ha alabado la actuación de la Policía.
"Nos sentimos ciertamente reconfortadas cuando nos llevó la Policía porque las personas que estaban allí nos estaban atacando y sino hubiera sido por esa intervención hubiéramos salido peor paradas", ha destacado Alcázar en el juicio de este martes, el primer juicio en España contra esta organización.