El gobernador Mike Pence acepta ser el aspirante a vicepresidente de Trump
- El hasta ahora gobernador de Indiana lo anuncia en la Convención Republicana
- Tiene un perfil de auténtico conservador y aporta experiencia política
- Pence: "Trump nunca da la espalda a los trabajadores que mueven este país"
- Especial elecciones presidenciales en Estados Unidos
El gobernador de Indiana, Mike Pence, ha aceptado este miércoles formalmente la nominación como aspirante a la Vicepresidencia de EE.UU. como compañero de fórmula del magnate Donald Trump, candidato del Partido Republicano a la Casa Blanca.
"Acepto vuestra nominación para competir y servir como vicepresidente de EEUU" en las elecciones del próximo 8 de noviembre, ha afirmado Pence ante la Convención Nacional Republicana en Cleveland (Ohio).
"El 8 de noviembre, yo sé que elegiremos a Donald Trump como el cuadragésimo quinto presidente de Estados Unidos", ha subrayado el gobernador, muy aplaudido por los delegados que abarrotan el pabellón Quicken Loans, donde se celebra el cónclave.
En su alocución, Pence ha incidido en que los comicios se reducen a "dos nombres en las urnas": Trump, quien escuchaba en el auditorio atentamente, y la virtual aspirante demócrata a la Presidencia, Hillary Clinton.
"Por tanto, resolvamos aquí y ahora que Hillary Clinton nunca se convertirá en presidenta de EEUU", ha aseverado el compañero de fórmula de Trump, al remarcar que la ex secretaria de Estado ofrece "un tercer mandato de (el presidente Barack) Obama".
Trump "es duro. Persevera. Ha llegado en los negocios tan lejos como es posible y, aún así, nunca le ha dado la espalda a los hombres y mujeres trabajadores que mueven a este país", ha dicho Pence.
Pence aporta experiencia y perfil de auténtico conservador
El multimillonario neoyorquino anunció el pasado viernes que Pence, un político ultraconservador bien visto por el sector tradicional del Partido Republicano, sería su candidato a Vicepresidente para las elecciones de noviembre.
Pence, de 57 años, debía decidir el pasado viernes si se presentaba a la reelección como gobernador, porque la ley de Indiana no permite competir por un cargo estatal y uno federal al mismo tiempo.
El gobernador de Indiana aporta a Trump su perfil de auténtico conservador y una experiencia política que puede reconciliar al magnate con el núcleo tradicional del partido.
El magnate quería un candidato a vicepresidente con andadura política que le ayudara a tender puentes con las mayorías republicanas en el Congreso, donde muchos legisladores aún recelan de su nominación.