La lucha contra el fuego se traslada al interior de Galicia, con varios incendios en Ourense y Lugo
- El que más preocupaba, el de Pobra de Trives (Ourense), queda controlado
- Las llamas de este fuego han calcinado la vivienda de una familia
- Ha quedado extinguido el de Porto do Son tras quemar 1.600 hectáreas
La batalla contra los incendios forestales se ha trasladado en las últimas horas al interior de Galicia después de que la semana pasada el fuego, que arrasó más de 7.000 hectáreas, se concentrara en municipios de A Coruña y Pontevedra más cercanos a la costa.
A última hora de este lunes 15 de agosto, las tareas de extinción se centran en cinco incendios: uno activos, uno estabilizado y otros tres controlados. El único incendio que permanece aún sin controlar es el de Cervantes, en Lugo, que ha quemado unas 30 hectáreas desde este domingo.
En Ourense, el incendio que más ha preocupado durante toda la jornada ha sido el de Pobra de Trives, en la parroquia de Navea, que obligó a mantener activada la "situación 2" por su cercanía a la población de Seixo hasta primera hora de la tarde y que ha quedado ya controlado.
Este fuego ha quemado 194 hectáreas, según los datos de la Consellería do Medio Rural, y ha calcinado una vivienda de una familia sin causar daños personales.
En la provincia de Ourense, hay otro incendio en Melón (parroquia de Quins), que ha quemado un centenar de hectáreas desde que se inició poco antes de la doce de la noche de este domingo y que ha ya ha sido estabilizado.
Extinguidos los incendios de Porto do Son y Cualedro
A última hora del lunes, ha quedado extinguido el incendios de Cualedro, en la parroquia de San Millao (Ourense). Entró en Galicia desde Portugal y ha quemado unas 450 hectáreas.
Según ha informado a última hora en Twitter la cuenta de la Xunta sobre incendios, también ha quedado extinguido el fuego de Porto do Son (en las parroquias de Xuño y Caamaño), en A Coruña. La última estimación de hectáreas afectadas es de 1.600, la mitad de ellas arboladas.
El de Porto do Son fue uno de los fuegos que más preocupó la semana pasada por su proximidad a núcleos poblados junto al de Arbo, en Pontevedra, que sigue controlado pero no extinguido tras quemar 1.583 hectáreas. También está bajo control el de Crecente, que ha afectado a otras 300.
La Consellería do Medio Rural ha informado también de que el operario que aún seguía ingresado por intoxicación de humo en un incendio en Sarreaus ha recibido el alta.