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La belleza oculta de la cotidianidad

  • Mónica Grande expone fotografías de objetos cotidianos tomadas con un smartphone
  • Podrá verse hasta el 25 de septiembre en el Jardín Botánico de Madrid

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Detalle de una de las obras de Mónica Grande
Detalle de una de las obras de Mónica Grande

"La belleza está, solo hay que saber mirar", dice Mónica Grande (Madrid, 1972). Y no podemos más que darle la razón. Todo lo que nos rodea tiene un punto hermoso que hay que buscar, cualquier objeto cotidiano puede convertirse en el protagonista de una obra de arte, solo debemos cambiar nuestra forma de mirar.

Y eso es lo que Grande nos muestra en La semilla de la felicidad es el instante, una exposición en la que la artista madrileña da una nueva entidad los objetos de su trabajo como arquitecta de interiores gracias a un smartphone. Cubos, escaleras, escombros... conforman los paisajes abstractos que convierten la fotografía en una obra casi pictórica.

Esta exposición, que toma su título de un proverbio chino, es la representación de "la obra dentro de la obra", como dice Grande. Y, así, las olas de plástico y las dunas de tela de saco crean un universo en el que las texturas, los volúmenes y las sombras cobran una importancia de la que habitualmente carecen.

La muestra, que podrá visitarse del 15 al 25 de septiembre de 2016 en el Real Jardín Botánico de Madrid, supone el regreso de Mónica Grande a las salas de exposiciones después de diez años alejada de ellas.

Una de las obras de Mónica Grande

Una de las obras de Mónica Grande Mónica Grande