Violentas protestas dejan al menos 17 muertos en República Democrática el Congo
- Kabila, presidente desde 2001, pretende prolongar su mandato contra la ley
- El retraso de las elecciones presidenciales ha disparado las protestas
- Fotos de cadáveres ensangrentados han inundado las redes sociales
Al menos 17 personas, entre ellas tres policías, han muerto este lunes en Kinshasa durante las protestas convocadas por la coalición opositora Rassemblement en contra del retraso de las elecciones presidenciales en la República Democrática del Congo (RDC), ha informado el Gobierno.
Desde primera hora los enfrentamientos han sido constantes entre la Policía y los manifestantes que se han reunido en Limete, uno de los bastiones de la oposición en la capital, para pedir la dimisión del presidente, Joseph Kabila, y la celebración de elecciones en diciembre.
"Tuvimos que defendernos y defender a otros civiles", ha afirmado ante los periodistas el portavoz de la Policía congoleña, el coronel Muana Mputu, quien ha precisado que uno de los agentes ha muerto quemado en plena calle.
Caos, disparos y cadáveres
El ministro del Interior, Evariste Boshab, ha informado de que la cifra de muertos ya ha ascendido hasta los 17, aunque el Gobierno proporcionará el martes el balance final de víctimas.
"Es triste que los actores políticos congoleños, concretamente la oposición y sus partidarios, hayan destruido lo que hemos construido con tanta dificultad", dijo Boshab.
En las últimas horas, fotos de cadáveres en el suelo envueltos de sangre han inundado las redes sociales para denunciar la brutalidad de las fuerzas de seguridad a la hora de reprimir las protestas.
Los disparos fueron constantes durante todo el día y la Policía los atribuyó a tiros al aire "para dispersar a los alborotadores" o para defenderse de algunos "antipatrióticos" que iban armados.
El viejo afán de perpetuarse en el poder
Las manifestaciones fueron convocadas por la oposición para denunciar el intento de Kabila, de 45 años, de retrasar las elecciones para prolongar su mandato, que inició en 2001, ya que según la Constitución no puede volver a optar a la reelección.
Esta semana es clave para el futuro de Kabila, pues la gobernante Alianza por la Mayoría Presidencial (AMP) y varios partidos opositores menores están en la fase final de un proceso de diálogo auspiciado por la Unión Africana (UA) para llegar a un acuerdo sobre los comicios.
La principal coalición opositora, liderada por el histórico político Étienne Tshisekedi, ha calificado el diálogo de fraudulento y acusa a los mediadores de favorecer a Kabila para que pueda alargar su mandato, que inició en enero de 2001, días después del asesinato de su padre, el exguerrillero Laurent-Désiré Kabila (1997-2001), y que revalidó en las elecciones de 2006 y 2011.
"Volvemos a las calles para demostrar a los dirigentes actuales y al poder que su tiempo ha llegado y que deben marcharse después de dos mandatos, que respeten la Constitución", declaró el líder opositor Joseph Olenga Nkoy.
Retraso hasta finales de 2017
Esta semana también se acaba el plazo en el que legalmente se pueden convocar las elecciones, previstas para el próximo 19 de diciembre, ya que el anuncio debe hacerse con 90 días de antelación.
Sin embargo, el mes pasado la Comisión Electoral Nacional (CENI) ya anunció que no terminaría el censo electoral hasta julio de 2017, decisión que ahora busca respaldar con un fallo del Tribunal Constitucional, que podría pronunciarse hoy mismo.
Si se mantiene el calendario fijado por la CENI, las elecciones no se celebrarían por lo menos hasta la segunda mitad de 2017. Otro punto de fricción es el futuro del propio Kabila, que ha sido acusado de retrasar las elecciones con el único objetivo de perpetuarse en el poder, pues su mandato acaba en diciembre y según la Constitución no puede volver a presentarse a la reelección.
Varios partidos opositores y organizaciones de la sociedad civil han propuesto que, en caso de confirmarse el retraso de las elecciones, un presidente interino que no sea Kabila se ponga al frente de un gobierno de unidad nacional.