Arrestados cuatro tripulantes del barco con 600 inmigrantes que naufragó cerca de la costa egipcia
- Al menos 50 personas han muerto en el accidente, pero se temen más víctimas
- Los servicios de rescate sólo han conseguido salvar a 169 personas hasta ahora
- Los propietarios de la embarcación continúan huidos
Las autoridades egipcias han arrestado a cuatro miembros de la tripulación del barco que naufragó este miércoles cerca de las costas egipcias con 600 migrantes y refugiados a bordo, de los cuales al menos 50 perdieron la vida en el accidente. Este jueves se han hallado ocho cadáveres.
La embarcación se hundió el miércoles en el mar Mediterráneo cerca de la costa de Kafr al Sheij, en el norte de Egipto. Los servicios de rescate han conseguido salvar a 169 personas hasta la fecha, por lo que se teme que el número de víctimas mortales puede ascender de forma vertiginosa en los próximos días.
La embarcación partió de un punto entre las localidades de Rashid y Baltím, donde la costa no está poblada y presenta una orografía complicada, con zonas de secano y lagunas, en la región del delta del Nilo.
La Fiscalía egipcia ha ordenado que la tripulación sea puesta bajo custodia policial durante cuatro días, mientras se lleva a cabo una investigación de lo ocurrido. Todos los migrantes rescatados están en libertad. Sin embargo, los propietarios de la embarcación y otras personas implicadas en el tráfico de personas continúan huidas.
Migrantes de Egipto, Sudán, Eritrea y Somalia
El primer ministro egipcio, Sherif Ismail, ha declarado que su Gobierno está totalmente comprometido con las labores de recate y que aquellos responsables de lo ocurrido deben ser castigados por la Justicia.
La embarcación llevaba a bordo personas procedentes de Egipto, Sudán, Eritrea y Somalia, según han informado las autoridades. No se sabe con seguridad cuál era el destino final del barco, pero todo apunta a que se dirigía a las costas de Italia.
Miles de personas procedentes del continente africano han intentado llegar a las costas italianas a través del mar Mediterráneo, sobretodo durante el verano, cuando el mar está más en calma. La inmensa mayoría de estos inmigrantes son víctimas de redes de tráfico de personas, que les ofrecen un billete de ida en embarcaciones precaria hacia Europa por grandes sumas de dinero.
La peligrosa ruta del Mediterráneo central
A pesar de que la inmensa mayoría de estas embarcaciones salen desde Libia, donde las mafias actúan con relativa impunidad, también hay muchos barcos cargados de inmigrantes que se dirigen hacia Europa desde Egipto. Los inmigrantes que sobrevivieron al naufragio de una patera cerca de la isla griega de Creta en junio admitieron que habían salido desde un puerto en Egipto. Murieron 320 personas en ese accidente.
Según datos de la Organización Internacional para las Migraciones, alrededor de 206.400 inmigrantes han cruzado el Mediterráneo este año. Entre enero y junio, 2.800 de ellos han perdido la vida en el mar, lo que supone un grave aumento en comparación con las 1.800 personas que murieron ahogadas durante el mismo periodo en 2015.
Alrededor de 1,3 millones de personas llegaron a las costas europeas el año pasado huyendo de la pobreza y de las dificultades económicas, lo que ha provocado una crisis política en Europa sobre cómo compartir la responsabilidad y hacer frente a la situación humanitaria.