Cáritas atendió a menos familias en 2015, pero tuvo que aumentar un 22% las ayudas

• Hay menos hogares en situación de vulnerabilidad pero sus carencias se agravan
• El 25% de su ayuda es a personas solas; otro 20%, a familias monoparentales

Cáritas atendió a menos familias en 2015, pero tuvo que aumentar un 22% las ayudas

Cáritas atendió en 2015 a menos familias -cuatro millones de personas frente a 4,3 de 2014-, pero ha tenido que aumentar en un 22% la cantidad de los recursos para las que siguen necesitando asistencia y acompañamiento.

La memoria de 2015, que permite hacer una radiografía de las personas vulnerables, refleja una disminución del número de hogares sin ingresos y de los que tienen todos sus miembros en paro, pero también que se ha intensificado la gravedad de las familias y personas a las que sigue acompañando.

La organización católica alerta de que este agravamiento continúa pese a "algunos síntomas de mejoría", como que, por ejemplo, por primera vez desde 2013 el número de hogares sin ingresos es menor de 700.000, la reducción de los hogares con todos sus activos en paro o que la tasa de desempleo haya pasado del 25% del segundo trimestre de 2014 al 20% en el mismo trimestre de este año. Por lo tanto, a su juicio, la mejoría es "frágil" y "superficial".

Así, en el programa de Acogida y Asistencia se han reducido los beneficiarios (Cáritas ayudó en 2015 a 1.974.000 personas en España y 2.080.000 en los países del Sur), pero se ha incrementado en un 22% la cantidad de recursos destinados a cada hogar.

Las personas que se quedan "en otra orilla", olvidadas

Una de cada cuatro asistencias es a personas solas, un seis por ciento más que en 2014 y un 50% desde 2011. También han crecido las familias monoparentales, que son el 19%, un cinco por ciento más que el pasado año y un 90 % desde 2011. Las familias con hijos también suben y son ya el 42% de las personas atendidas.

“Aumentan las personas solas y las familias se empobrecen, sobre todo las monoparentales y las que tienen varios hijos“

El secretario general de Cáritas, Sebastián Mora, atribuye este proceso de "dualización" y de "fractura de lo social" al olvido de las personas que se quedan "en otra orilla", algo que se percibe especialmente en algunos colectivos como los inmigrantes temporeros, las mujeres víctimas de trata por explotación sexual, las personas sin techo y los migrantes con una situación sobrevenida en situación de indocumentación.

La falta de Gobierno perjudica a los excluidos

Todos ellos quedan "fuera del discurso" oficial. "La falta de estabilidad, de un Gobierno que legisle y que genere presupuestos es clave para todos los procesos sociales, y evidentemente para los que están en una situación más frágil", ha aseverado. En ese sentido,  la organización pide que las personas excluidas estén en el discurso de los pactos para formar gobierno.

Durante la presentación se recordó la definición que el papa Francisco hace de Cáritas como "la caricia de la Iglesia" a quienes peor lo pasan. En esta línea, el presidente de Cáritas, Rafael del Río, subrayó que tras las cifras están "los descartados, los últimos, los no atendidos".

Cáritas prestó asistencia a cuatro millones de personas tanto en España como en los países del mundo más golpeados por la desigualdad, a la que dedicó 328 millones de euros, un 7,5% más que en 2014, cuando fueron 4,3 millones.