López Negrete niega haber recibido ofertas para retirar la acusación de la infanta en el caso Nóos
- Defiende el "secreto profesional" sobre la supuesta oferta del rey Juan Carlos
- La Casa del Rey no comenta la grabación por "respeto" al poder judicial
- La abogada de Manos Limpias declara como imputada en el caso Ausbanc
- El fiscal pide que se le prohíba salir del país y que comparezca en el juzgado
La abogada Virginia López Negrete ha negado ante el juez que investiga las extorsiones de Ausbanc y Manos Limpias, Santiago Pedraz, haber recibido cualquier tipo de oferta económica para retirar la acusación a la infanta Cristina en el caso Nóos.
Negrete ha comparecido durante unas dos horas como investigada (imputada) en la Audiencia Nacionaly al término de su declaración el fiscal, así como las acusaciones ejercidas por el BBVA y Podemos, han pedido al juez que le prohíba salir de España y le obligue a comparecer quincenalmente en el juzgado, una decisión que el magistrado resolverá el miércoles.
Habría denunciado ofertas por la infanta
Según fuentes jurídicas presentes en la declaración, la abogada ha sostenido que ella no participó en ninguna de las extorsiones que se achacan a Ausbanc y Manos Limpias y que era una simple abogada externa contratada por esta última organización para llevar dos casos, entre ellos la acusación en Nóos.
En concreto, ha subrayado que no tiene ningún conocimiento de ningún ofrecimiento económico para retirar la acusación contra la infanta Cristina en el caso Nóos. "No sabía nada de eso", ha asegurado la abogada acusadora en Nóos ante Pedraz, al mismo tiempo que ha indicado que si hubiese estado al tanto de alguna oferta lo habría denunciado ante un juzgado de guardia.
A su salida de la Audiencia, preguntada por un audio que publica El Mundo entre ella y el líder de Manos Limpias, Miguel Bernad, en el que hablan de una supuesta oferta de dos millones de euros para retirar la acusación a la infanta, ha indicado que no había podido leer la noticia y que además tiene "deber de guardar secreto profesional" hacia su cliente y, por ello, habrá "muchas cosas" de las que no podrá "opinar".
Presunta oferta del rey Juan Carlos de dos millones
En esa conversación en una cafetería madrileña, Bernad le cuenta a López Negrete un supuesto encuentro con Iñigo Alfonso de Cotoner y Martos, actual marqués de Mondéjar e hijo de Nicolás Cotoner y Cotoner, exjefe de la Casa del Rey y asesor y amigo personal de Don Juan Carlos.
Según Bernad, a través del marqués le habría llegado un ofrecimiento del rey Don Juan Carlos en diciembre de 2015, es decir, después de su abdicación, por el que ofrecía a Manos Limpias más de dos millones de euros a cambio de retirar la acusación contra la infanta.
"No tengo nada que ocultar, no podrán demostrar absolutamente nada más porque no hay nada que ocultar (...). Quizá tenga algo ver que estamos a veinte días de que se dicte la sentencia del caso Nóos", ha declarado a los periodistas.
"Siempre he denunciado presiones que no han llegado al límite del chantaje, por eso nunca he denunciado ninguna, pero vosotros sabéis que he recibido muchas presiones a lo largo de estos años para no llegar hasta donde he llegado hasta el final", ha apostillado.
Ayuda en los chantajes en el 'caso Nóos'
La Fiscalía citó a Negrete a raíz de unos informes policiales que ponen de relieve sus estrechas relaciones con el presidente de Ausbanc, Luis Pineda, en base a correos electrónicos entre ambos en los que, entre otras cosas, se intercambian información sobre el caso Nóos.
La letrada ha dicho que no reconoce esos correos, ante lo que el fiscal, Daniel Campos, le ha hecho ver que son comunicaciones intervenidas por la Policía con todas las garantías. "No digo que sean falsos, pero no los reconozco", ha afirmado la investigada.
La Fiscalía también le acusa de haber usado su condición en el caso Nóos para ayudar en los chantajes, concretamente a extorsionar al BBVA cuando pidió al juez de Nóos, José Castro, que volviera a imputar al directivo de la entidad Antonio Ballabriga.
El fiscal le ha preguntado por qué primero no se opuso a que el juez archivara la causa contra Ballabriga y, unos meses después, pidió que se le imputara de nuevo, coincidiendo con una junta de accionistas del BBVA a la que ella asistió junto con Pineda y en la que habló en público de este tema.
Negrete ha dicho que pidió la imputación porque aparecieron unos correos electrónicos del socio de Iñaki Urdangarin, Diego Torres, que implicaban al directivo del BBVA, y ha considerado una "casualidad" que coincidiera en el tiempo con la junta de accionistas.
Acudir a la junta, ha indicado al juez, fue un "error" que hizo porque se lo pidió Manos Limpias, y ha insistido en la "casualidad" de que viajara a Bilbao a esa reunión en el mismo avión que Pineda y se alojara en su mismo hotel.
La Casa del Rey no comenta la grabación de Manos Limpias
La Casa del Rey no comenta la grabación en la que el secretario general de Manos Limpias afirma que el rey emérito, Don Juan Carlos, ofreció al sindicato a través de un intermediario dos millones de euros a cambio de que retirara la acusación contra la infanta Cristina, que finalmente se sentó en el banquillo en el juicio del caso Nóos, a día de hoy visto para sentencia.
Un portavoz del Palacio de la Zarzuela ha respondido a Europa Press que el contenido de la conversación entre Miguel Bernad y la abogada López Negrete, desvelada por El Mundo, trata de un asunto que está en los tribunales, por lo que la institución no tiene ningún comentario que hacer a ese respecto.
En caso Nóos, la hija del rey Juan Carlos y hermana del rey Felipe VI se enfrenta a una petición de ocho años de prisión como cooperadora necesaria de dos delitos fiscales, una solicitud que formula el sindicato Manos Limpias, única acusación del proceso que ejerce acciones penales contra Cristina de Borbón.
Manos Limpias considera que el papel de la infanta fue imprescindible para que su marido defraudase hasta un total de 337.138 euros al fisco por su sociedad compartida, Aizoon. La Fiscalía, en cambio, cree que no existen sobre ella indicios de haber cometido delito alguno, pese a obtener un beneficio ilícito de esos fondos supuestamente defraudados por su marido.