Los bombardeos sobre Alepo causan 846 heridos y colapsan los hospitales
- La tercera parte de los heridos son niños, informa la OMS
- En los últimos días ha habido ataques "deliberados" a los dos principales hospitales
- Tan solo quedan "menos de treinta médicos" en el sector oriental de la ciudad
- Save the Children: "Los niños ya no están seguros ni en sótanos ni en refugios subterráneos"
Al menos 39 personas han muerto este viernes por bombardeos y disparos de cohetes en distintas partes del territorio sirio, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos. Los últimos bombardeos sobre el este de la ciudad siria de Alepo han causado 846 heridos, la tercera parte de ellos niños, lo que ha colapsado el ya pobre sistema sanitario de la urbe, según ha informado este viernes la Organización Mundial de la Salud (OMS).
"Hasta hace poco había ocho hospitales que funcionaban en Alepo, ninguno de ellos a su capacidad total, pero en los últimos días los dos hospitales más grandes fueron atacados deliberadamente lo que ha reducido severamente la capacidad de los sanitarios", ha declarado el director de Emergencias de la OMS, Rick Brennam.
Ha confirmado que ahora quedan "menos de treinta médicos" en el sector oriental de Alepo, quienes siguen atendiendo a las víctimas "a pesar del tremendo agotamiento físico y emocional que sufren... el trabajo que están haciendo va más allá del heroísmo", ha agregado.
La organización, que conoce en detalle la situación en el sector este de Alepo a través de personal médico que sigue trabajando y de ONG locales, ha señalado que desde la intensificación de los bombardeos en las últimas dos semanas 338 personas han muerto, incluyendo 106 menores.
Escasez de médicos y de material y sin ayuda humanitaria
"Tenemos cuatro demandas: que se detengan los asesinatos, que paren los ataques contra centros sanitarios, que se permita la evacuación de los enfermos y heridos y que se deje entrar la ayuda", resumió Brennam.
Sostiene que los médicos y el personal sanitario están atendiendo a los heridos sin el material mínimo requerido.
"Llevo trabajando 23 años en asistencia humanitaria, he estado en zonas de conflicto en cuatro continentes, pero raramente he visto condiciones tan graves como la del este de Alepo. Esto va más allá de lo imaginable", sostiene el especialista.
El representante de la OMS ha dicho que hace poco se calculaba que había 135 camas disponibles en los ocho hospitales en el este de Alepo, pero los ataques contra los dos últimos hospitales han reducido drásticamente esa capacidad.
Brennam ha descrito una situación en la que civiles y niños deben ser atendidos sobre el suelo, en medio de los corredores de los pocos hospitales que siguen funcionando. "Cuatro niños han muerto en los últimos días porque la unidad de cuidados intensivos estaba llena", ha lamentado.
La OMS tiene posicionados desde hace semanas equipos y suministros médicos cerca de Alepo que son suficientes para atender a 140.000 personas, pero los combates no permiten transportarlos hasta el este de la ciudad.
Asimismo, Brennem ha pedido que se permita evacuar a los enfermos y heridos más graves, quienes podrían ser conducidos a hospitales del norte de Siria, en la región próxima a Turquía, que han sido preparados para recibirlos.
Los niños no están seguros en ningún lado
Save the Children también ha alertado este viernes de que "los niños en Alepo ya no están seguros ni en sótanos ni en refugios subterráneos por el uso de las bombas antibúnker" y que "estos nuevos misiles impiden que los menores puedan seguir con su educación".
Según ha informado la organización humanitaria en un comunicado, este tipo de bombas son capaces de no detonarse cuando perforan el suelo y estallan una vez que llegan a los cuatro o cinco metros de profundidad. Conocidas también como bombas terremoto , están diseñadas para destruir instalaciones militares.
Por este motivo, según indican desde esta ONG, casi 100.000 niños en edad escolar que tenían previsto empezar este curso el sábado en el este de Alepo no podrán ir al colegio, debido a que como continúan los brutales ataques a la ciudad, los centros permanecerán cerrados.
"Más de 300 niños han muerto o han resultado heridos en el este de Alepo en los últimos cinco días", recalca Save the Children. "Dado el peligro que supone para los menores incluso estar en sus propios hogares, no es seguro que las escuelas vuelvan a abrir", advierte, al tiempo que alertan de que "los colegios carecen de necesidades básicas como combustible para calentar los sótanos, suministros de agua, libros de texto y lápices".