Sánchez dimitirá si el Comité Federal del PSOE apoya la abstención para facilitar el gobierno de Rajoy
- Pide que el Comité decida entre nombrar una gestora o mantener el 'no' al PP
- El secretario general sigue apostando por intentar "un gobierno de cambio"
- Asegura que no podría "administrar" una decisión que no comparte
- La comparecencia de Pedro Sánchez horas antes del Comité Federal [pdf]
El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha pedido que el Comité Federal extraordinario convocado este sábado decida la posición del partido entre el nombramiento de una gestora y la abstención para facilitar el gobierno de Mariano Rajoy, que según él defienden sus críticos, y la celebración de un Congreso e "intentar un gobierno de cambio y transversal". En caso de que el máximo órgano del partido entre congresos se decante por la abstención ha sugerido que dimitirá porque no podría "administrar una decisión" que no comparte, desdiciéndose así de lo que aseguró solo tres días atrás, cuando dijo que no dimitiría aunque el Comité no aprobara el Congreso Federal.
"El Comité Federal puede cambiar esa hora de ruta y cambiar a la abstención para que gobierne Mariano Rajoy", ha señalado Sánchez en una comparecencia sin preguntas que ha tenido lugar pasadas las 20:30 horas en la sede de la calle Ferraz. Según ha dicho, lo que tiene que decidir es su posición ante una investidura del presidente del Gobierno en funciones, porque "ésta y no otra es la cuestión de fondo" y "el auténtico debate" que hay que tener.
Sin hacer una referencia explícita a su posible dimisión, Sánchez ha dejado la puerta abierta a esa posibilidad al asegurar que en caso de que el Comité Federal de este sábado se decante por la abstención "no podría administrar una decisión" que no comparte. "Si algo me enseñaron mis padres es que debo preservar es mi palabra y mis convicciones", ha señalado.
Sánchez ha transmitido este mensaje en la primera comparecencia que ha realizado después de la dimisión de 17 miembros de la Ejecutiva Federal, solo unas horas antes de que se celebre el Comité Federal extraordinario del partido con dos puntos en el orden del día: dar cuenta de las dimisiones y convocar el Congreso Federal.
La abstención "abriría la legislatura del chantaje"
Sánchez ha defendido la "hoja de ruta" que decidió el Comité Federal para oponerse a una investidura del líder del PP, Mariano Rajoy y al mismo tiempo ha asegurado que "nunca" ha "creído" que los compañeros que han defendido que el PSOE facilite la gobernabilidad estén "más cerca de la derecha".
Sin embargo, también ha advertido de las "consecuencias" que tendría una abstención, y el error que supondría para millones de votantes de socialistas. "La abstención abriría la legislatura del chantaje y el PSOE no podría bloquear los presupuestos del estado o las leyes mas importantes que presentara el gobierno de Rajoy", ha añadido.
El líder del PSOE ha recalcado que él siempre ha defendido la hoja de ruta que ha sido "establecida por el Comité Federal", que pasa por "votar 'no' a Rajoy e intentar un gobierno alternativo, transversal y de cambio", pero también ha asumido que el Comité Federal "puede cambiar esa hoja de ruta y pasar a la abstención para que gobierne Rajoy".
Sánchez ha identificado en esta posición a sus críticos, pero ha recalcado que esto no implica que crea que esto "signifique que aquellos compañeros que lo defienden estén más cerca de la derecha". "Lo que sí advierto es de sus consecuencias, del error que ello significaría para el Partido Socialista", ha remachado.
El orden del día del Comité Federal no cambia
Después ha defendido que el PSOE hable sobre este asunto y ha apuntado que "los argumentos de unos y otros son conocidos". "El debate es sano, es democracia, nunca fractura. Yo quiero una organización que debata hasta la extenuación, que vote y una vez votado, toda la organización vaya a una detrás de la decisión", ha dicho, para después advertir de que "lo contrario, la discrepancia de voces, no hace bien" al PSOE.
Por eso, ha insistido en que "resolver el debate es indispensable y urgente". "Es importante para el PSOE y también para España que el principal partido de la izquierda transite por un único camino", ha remachado. Y ha defendido que el lugar donde deben "expresarse" los militantes es el congreso federal, que ahora debe convocarse con carácter extraordinario después de las 17 dimisiones que se produjeron el pasado miércoles y que, sumadas a tres vacantes previas, hacen que la Ejecutiva haya perdido la mayoría de sus miembros.
Fuentes socialistas recogidas por Europa Press han explicado después que, con este mensaje, Sánchez ha querido "centrar el debate" de este sábado y que no se trata de un cambio del orden del día, han explicado, sino que se mantiene lo previsto en la convocatoria de este jueves.
Es decir, que se someterá a votación convocar un congreso en noviembre, con primarias el 23 de octubre, y se entenderá que si Sánchez no logra sacar adelante esta propuesta, dará un paso atrás para que se monte una gestora.
La comparecencia de Sánchez se produce solo unos minutos después de que los tres miembros de la Comisión de Ética y Garantías del PSOE más afines al sector crítico con Pedro Sánchez hayan entregado un dictamen en la sede del partido en Ferraz en el que dan por "disuelta" la Ejecutiva y abogan por el nombramiento de una gestora que asuma la dirección.