Acusan de homicidio a 4 personas en Hungría por la muerte de 71 refugiados en un camión
- Perecieron asfixiados 4 niños, 8 mujeres y 59 hombres en un camión frigorífico
- Una banda de traficantes los trasladaba a Austria por Budapest
- Llegaron a transportar unas 1.500 personas y ganar 1,5 millones de euros
La Policía de Hungría ha propuesto acusar de homicidio a cuatro de los ocho detenidos por la muerte por asfixia de 71 refugiados en un camión frigorífico que fue abandonado en una autopista en el sur de Austria en agosto de 2015 durante una de las primeras avalanchas de migrantes a través de Europa.
Zoltán Boross, director de la Unidad contra la Inmigración Ilegal de la Oficina Nacional de Investigaciones, ha explicado este miércoles a la prensa que los detenidos se encuentran en prisión preventiva, mientras que frente a otras tres personas se ha emitido una orden de detención europea.
El descubrimiento de los 71 refugiados muertos causó una gran conmoción en Europa, días antes de que Alemania y Austria decidieran el 4 y 5 de septiembre abrir sus fronteras a la llegada de solicitantes de asilo.
Cadena perpétua
En Hungría el tráfico ilegal de personas puede ser castigado con hasta 16 años de cárcel, mientras que el homicidio puede suponer una pena de cadena perpetua. Por el momento las autoridades no han informado cuándo empezará el juicio.
El camión frigorífico partió el 27 de agosto desde las cercanías de la ciudad de Kecskemét, para después ir hacia Budapest y seguir hacia Austria.
Las investigaciones aclararon que los 4 niños, 8 mujeres y 59 hombres que viajaban en el camión fallecieron debido a una larga y permanente escasez de oxígeno tres horas después de salir de Kecskemét, por lo que la policía calcula que la tragedia sucedió en las cercanía de Budapest.
Traficantes búlgaros y afganos
El camión fue encontrado por agentes austríacos aparcado en el arcén de la autopista en las cercanías de la frontera con Hungría. La banda estaba dirigida por un ciudadano afgano y la integraban también un búlgaro-libanés y otros nueve búlgaros, estos últimos en su gran mayoría trabajaban como conductores.
Uno de ellos, un búlgaro de 25 años, condujo el camión, que huyó del lugar en uno de los dos coches lanzadera que lo acompañaba, aunque sin éxito, ya que la policía lo detuvo en menos de ocho horas, ha recordado Boross.
Entre los acusados "algunos han confesado su participación y otros negaron todo", ha agregado el policía, quien ha recordado+ que la "codicia de la banda era tan grande" que otro día "llenaron otro camión más, con 64 inmigrantes".
Cuando Europa se inundó de migrantes
La tragedia sucedió cuando Hungría era una zona de tránsito para centenares de miles de refugiados que querían llegar a Europa Occidental, principalmente a Austria, Alemania o Suecia.
Las autoridades húngaras, en colaboración con las austríacas y alemanas, así como con la Europol ha investigado los hechos y hasta el momento han podido documentar que esta banda de traficante transportó refugiados de forma ilegal en otras 25 ocasiones.
Cada refugiado pagaba hasta 1.200 euros para llegar desde la frontera húngaro-serbia a Austria o Alemania y la banda transportó a unas 1.500 personas en total, desde el febrero de 2015 hasta su detención.
Entre 150 y 200 casos al mes
La policía estima que los ingresos de los traficantes superaron los 1,5 millones de euros y las autoridades han confiscado 15 vehículos que usaba la banda.
Por su parte, Robert Screpinko, director del Centro contra el Tráfico de Migrantes de Europol ha añadido que solo el año pasado el tráfico de personas ha generado unos ingresos de hasta 6.000 millones de euros para los delincuentes.
"La Europol se entera de entre 150 y 200 casos cada mes", ha subrayado Screpinko, destacando la importancia de la coordinación entre las autoridades de los países europeos.