La crisis llega a la Seminci con 'La madre', 'Aquarius' y 'La ciénaga'
- Alberto Morais presenta La madre, con Laia Marull
- El cine colombiano y brasileño entra también en competición
La crisis planea como trasfondo de historias de abandono, especulación inmobiliaria y dependencia, ejes temáticos de las tres películas proyectadas este martes dentro de la 61ª Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci), donde el cine español e iberoamericano ha sido protagonista con La madre, Aquarius y La ciénaga.
El segundo y último filme español a concurso en el festival, titulado La madre y protagonizado por Laia Marull, lleva la firma de Alberto Morais (Valladolid, 1976) y cierra la reflexión sobre el desamparo y la orfandad personales que ya le ocuparon antes en Las olas (2012) y Los chicos del puerto (2013).
"Intenta dar fe del tiempo que vivimos: una verdadera guerra económica que en muchos sitios llaman crisis y afecta aun nivel alto de población", en el caso de este largometraje a "una madre que intenta hacerse cargo de su hijo y a un hijo que se hace mayor demasiado pronto", ha resumido Morais ante los informadores.
La guerra económica, ha insistido, "empezó hace más tiempo del que creemos y desaparecerá más tarde de lo que pensamos", ha analizado antes de poner como ejemplo el abandono de los altos hornos de Puerto Sagunto (Valencia), lugar elegido para la filmación y objeto de la reconversión industrial de los años ochenta.
Laia Marull es esa madre que "dice mucho con pocas palabras" y a la que "no hemos querido juzgar ni dignificar, sino presentar de la forma más simple posible para extraer la esencia del personaje desde todos los matices posibles", ha comentado la actriz delante del jovencísimo Javier Mendo, su hijo en la ficción.
Rasgos temáticos y estilísticos que recuerdan a los realizadores Ken Loach y a los hermanos Dardenne rezuma este nuevo trabajo de Morais con un discurso narrativo construido desde la mirada del hijo, abocado a su reclusión en un centro de menores ante la impotencia de una madre errática e incapaz de retomar el rumbo.
El desamparo, la preocupación, la necesidad, la desesperación y la búsqueda son algunos de los rasgos que ha acentuado el director, devoto de Charles Chaplin, Roberto Rossellini y de Pier Paolo Pasolini entre sus "múltiples referencias", pero también de Víctor Erice, "uno de los francotiradores del cine español junto a Francisco Regueiro y Basilio Martín Patino que trataron de modernizar el cine español" durante el franquismo.
Aquarius, especulación inmobiliaria
La veterana actriz Sonia Braga es la protagonista de Aquarius, del brasileño Klebr Mendoça Filho y cuyo título es el nombre de un edificio donde reside doña Clara, única inquilina de ese inmueble situado en el puerto marítimo de Recife (Brasil), donde resiste a todas las presiones de un promotor inmobiliario para que venda su piso.
La voracidad y la ambición que devora a las gentes más débiles es la metáfora de esta cinta de casi dos horas y media de duración donde la música y el espacio juegan un papel primordial en las intenciones en este segundo largometraje de ficción de Mendoça Filho después de Neighboring sounds (2012).
La ciénega, el problema de la dependencia en las clases bajas
Han concursado también en esta jornada el tándem colombiano formado por Manolo Cruz y Carlos del Castillo, el primero además como actor y guionista de La ciénaga, rodada cerca del Caribe en Tasajera y Pueblo Viejo, entre Santa Marta y Barranquilla, en el norte del país.
Manolo Cruz encarna el papel de Alberto, a quien una enfermedad degenerativa ha condenado a vivir conectado a una máquina en una humilde casa flotante situada en una ciénaga, a escasos metros del mar que anhela conocer y al cuidado de una madre dedicada por completo a su asistencia.
El problema de los dependientes en las clases bajas y la situación de los servicios sociales figuran también en una película de gran intensidad dramática y emotiva que en el caso de Carlos del Castillo supone su debut en la dirección.