Bulgaria y Rumanía apoyan el CETA tras acordar con Canadá el levantamiento de visados
- Ambos países levantan su veto a la firma del acuerdo de libre comercio
- Los búlgaros y rumanos no necesitarán visado en Canadá en 2017
Bulgaria y Rumanía votarán a favor del tratado de libre comercio entre la Unión Europea (UE) y Canadá, conocido como CETA, algo que era esperado ya que Ottawa había dado señales positivas a la condición de levantar el régimen de visados para ciudadanos búlgaros y rumanos.
"El Gobierno autoriza a su representante permanente en la Unión Europea" a firmar el documento bajo "la condición del compromiso adquirido por el Gobierno de Canadá de cancelar los requisitos de visados para ciudadanos búlgaros", señaló este martes Sofía en un comunicado.
El gobierno búlgaro ha argumentado que sólo la exención total de visados permitiría a Bulgaria sacar un provecho justo del CETA.
La luz verde de Bulgaria había sido ya dada por segura después de que a principios de mes, el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, prometiera a su homólogo búlgaro, Boiko Borisov, que a partir de 1 de mayo de 2017 se eliminará la necesidad de visado para los búlgaros que ya hayan estado en Canadá, para los que tienen visado para Estados Unidos y para los empresarios.
Rumanía no tiene objeciones
En el mismo sentido, el presidente rumano, Klaus Iohannis, indicó el viernes pasado que "Rumanía no tiene más objeciones ante el acuerdo comercial con Canadá". Según el compromiso entre Bucarest y Ottawa, los rumanos que ya hayan viajado a Canadá no necesitarán visado a partir del primero de mayo de 2017, mientras que se eliminará definitivamente este requisito desde el uno de diciembre del mismo año.
Sin embargo, el Gobierno de Canadá podría revisar este acuerdo si en los primeros tres años tras el levantamiento del sistema de visados observa que en el país vive de forma ilegal un número considerable de inmigrantes rumanos.
La aprobación del CETA por la UE y Canadá está actualmente bloqueada por el rechazo de Bélgica, debido a su vez a la negativa dada por la región belga de Valonia.