Esperanza en medio del horror de Mosul
- Un soldado iraquí encuentra a su madre entre los civiles que huyen de la ciudad
- Llevaban dos años sin verse y se han fundido en un abrazo entre lágrimas
En medio del horror de la batalla de Mosul, donde las fuerzas de Irak combaten para expulsar a los yihadistas del Estado Islámico, un soldado iraquí ha recuperado la esperanza al reencontrar a su madre, a la que hacía dos años que no veía, entre los civiles que huyen de la ciudad.
Saad, oriundo de Mosul, no había podido ver a su madre desde que los yihadistas habían tomado el control de la ciudad, en 2014. Pero hace unos días oyó que estaba en uno de los autobuses que diariamente están evacuando a los civiles a medida que las tropas iraquíes avanzan en el que era el principal feudo terrorista en el país.
Tras hallar el convoy y buscar en tres autobuses diferentes, Saad ha podido finalmente encontrar a su madre; ambos se han fundido, bañados en lágrimas, en un abrazo que refleja el sufrimiento de los cientos de miles de civiles que han estado sojuzgados en Mosul por el Estado Islámico.
Miles de desplazados
“No llores, querido. Eres un hombre, no llores. Déjame olerte, te he echado de menos“
"No llores, querido. Eres un hombre, no llores. Déjame olerte, te he echado de menos", exclama la madre, de la que no se conoce el nombre, durante su reencuentro con Saad, que acierta a responderle: "Moriría por ti".
La batalla para recupera Mosul de manos de los yihadistas es la mayor que se libra en suelo iraquí desde la invasión estadounidense en 2003, con las tropas iraquíes, los kurdos y los milicianos chiíes asediando la ciudad desde distintos puntos.
Unas 56.0000 personas han abandonado sus hogares y han sido reubicadas en campamentos instalados en el desierto y en otras áreas seguros de los alrededores desde que comenzó la ofensiva, a mediados de octubre, aunque Naciones Unidas y el Gobierno iraquí han advertido de que el número de desplazados puede ascender a cientos de miles a medida que el frente avance.