La firma de ropa Blanco solicita su segundo concurso de acreedores en tres años en España y Portugal
- Los nuevos propietarios, AC Modus, no encuentran "inversor idóneo"
- La marca Blanco cuenta con 102 puntos de venta en España
- En los últimos años ha despedido a 900 personas en dos ERE
La firma de moda Blanco se ha declarado insolvente en España y Portugal por segunda vez en tres años, después de que los nuevos propietarios, AC Modus, hayan sido incapaces de encontrar un "inversor idóneo" para el negocio, según ha informado la enseña textil en un comunicado.
En concreto, este es el segundo concurso de acreedores que encara la firma de moda, después de que en junio de 2013 la enseña lo solicitara cuando estaba controlada por el empresario Bernardo Blanco, que lo pidió debido a la gravedad de sus problemas económicos y financieros y con el objetivo de conseguir la viabilidad de la compañía.
AC Modus, que se hizo con la compañía hace unos meses, ha indicado que tras mantener una "importante inversión" en el negocio de España y Portugal, ambas divisiones siguen sin "generar beneficios", por lo que en los últimos dos meses han buscado inversores para reflotar el negocio.
Sin embargo, la firma emiratí ha señalado que a pesar de los "grandes esfuerzos" realizados, los intentos para encontrar un inversor idóneo han resultado "infructuosos", por lo que han tomado la decisión de "someterse a los procedimientos de insolvencia aplicables" en cada país, ya que la actual situación del negocio exige la "adopción de decisiones basadas en la evolución del mercado y del futuro" de la sociedad.
900 empleados afectados por los dos ERE
Blanco reconoce que comprende la "incertidumbre" de los trabajadores y que tratará de ejecutar este proceso con el "máximo respeto" a sus empleados y con el mínimo impacto negativo tanto para la plantilla como para los acreedores, ya que "hará todo lo posible para minimizar los efectos de las decisiones adoptadas".
La firma textil presentó el pasado mes de septiembre su tercer Expediente de Regulación de Empleo (ERE) en los últimos años, que finalmente fue anulado, después de que los anteriores ajustes de plantilla hubieran provocado la salida de unos 900 empleados de la enseña de moda.
La compañía, que cuenta con 102 centros de trabajo en España, ya aplicó el pasado año un ajuste de personal que afectó a un máximo de 189 trabajadores, que se sumaron a los 711 que salieron de la firma en 2013, cuando presentó concurso voluntario de acreedores.