Acuerdo para establecer por primera vez una cuota de captura de pez espada en el mar Mediterráneo
- Se ha fijado 10.500 toneladas al año desde 2017 para recuperar la especie
- El pacto, alcanzado por la ICCAT, comisión compuesta por 50 países
La Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (ICCAT, por sus siglas en inglés) -que incluye a 50 países- ha acordado establecer un plan de gestión y conservación para el pez espada para los próximos 15 años que fija un Total Admisible de Capturas (TAC) de esta especie en 10.500 toneladas en 2017 que se irán reduciendo progresivamente (un 3% anual entre 2018 y 2022).
Además, se establece un aumento de la talla mínima de capturas hasta los 100 centímetros, ligeramente superior a la actual, de 90 centímetros. La talla anterior era superior, pero hacer varios años, a petición de España, se rebajó hasta esos 90 centímetros, señala Europa Press. En la actualidad, según datos de ICCAT, la pesca de inmaduros, es decir, por debajo de esa talla, alcanza el 70%.
La Comisión Europea ha celebrado el acuerdo global alcanzado y ha destacado que se trata de un "paso decisivo" para la conservación y la explotación "sostenible" de esta especie. El comisario de Medio Ambiente y Pesca, Karmenu Vella, ha subrayado que la Unión Europea asume una "responsabilidad especial" como uno de los "actores importantes" de esta pesquería. "Se lo debemos a nuestros pescadores, especialmente a los pequeños", ha manifestado.
"Hemos sentado las bases para la conservación y la explotación sostenible de esta especie icónica. Espero poder cooperar con los países del Mediterráneo que no forman parte de la UE para continuar mejorando la gobernanza de este mar", ha añadido.
En un comunicado, la Comisión Europea ha destacado que la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (ICCAT) ha alcanzado un acuerdo gracias a su "impulso". La flota comunitaria, calcula Bruselas, es responsable de aproximadamente el 80% de las capturas de pez espada.
El acuerdo entrará en vigor en 2017 y se aplicará durante los próximos 15 años con el objetivo de alcanzar el Rendimiento Máximo Sostenible (RMS), en todo el mar Mediterráneo y a todos los operadores. Otros países que forman parte del acuerdo, además de los miembros de la UE, son Túnez, Marruecos, Argelia, Turquía y Libia.
El plan llega "con una década de retraso" para los ecologistas
Por su parte, la organización ecologista Oceana ha aplaudido estas medidas, aunque ha considerado que el plan llega "con una década de retraso", según ha apuntado en un comunicado el director ejecutivo de la organización en Europa, Lasse Gustavsson.
Este último ha agregado que, aunque se felicitan por el cambio de paradigma, hubieran esperado "un plan de recuperación más sólido", ya que lo aprobado este lunes "es muy limitado, está muy alejado de las recomendaciones científicas y deja en peligro al pez espada".
En la misma línea se ha pronunciado la también organización ecologista WWF, que ha saludado el esfuerzo por reducir las capturas tras la "sobrepesca" del pez espada en los últimos treinta años.
El TAC acordado, ha dicho WWF, es un "primer paso esencial aunque queda mucho por hacer", y ha agregado que "persisten preocupaciones" porque "la cuota acordada por el Icaat para 2017 será mayor que las capturas reportadas en 2015".
La patronal de armadores españoles rechaza el acuerdo
Por su parte, la patronal española de armadores Cepesca ha mostrado su rechazo ante el TAC para el pez espada y ha dejado patente la preocupación de la flota de palangre de superficie por las "consecuencias negativas que puede generar la aplicación de este plan".
También ha destacado la "incertidumbre sobre las cuotas que le tocarán a España en 2017, al no haberse establecido aún el reparto entre las partes contratantes".
"El hecho de que la cuota no se reparta ahora, originará, previsiblemente, una pesca olímpica que no ayudará a gestionar mejor la pesquería", ha considerado el secretario general de Cepesca, Javier Garat, en un comunicado.
Por su parte, los representantes de las cofradías españolas han denunciado durante el debate la utilización de redes de enmalle a la deriva por otros países en la pesca del pez espada. Esta práctica, argumentaron, puede favorecer mucho a las naciones que la utilicen en caso de establecerse un TAC, como el que se ha acordado.
Aparte de la discusión sobre el pez espada, el Icaat ha decidido no subir más el TAC del atún rojo, para el que ya se había aprobado un incremento del 20%, hasta llegar a un máximo de 23.155 toneladas para el próximo año.